Los jueces decidieron que Volkswagen comunique a los compradores de automóviles FOX, Voyage y Novo Gol de los años 2009 y 2010 la “necesidad de verificar” el estado de los motores y en caso de hallar signos de desgaste prematuro “las piezas tendrán que ser sustituidas por la fábrica”, reza un comunicado del Tribunal de Justicia regional.
La magistrada Carla Patrícia Boschetti Marcon Della Giustina consideró que los documentos presentados por el Ministerio Público apuntan a “prácticas ilegales y abusivas” por parte de Volkswagen, por lo que decidió que la firma inserte anuncios en los periódicos de mayor circulación en cada región brasileña para comunicar a sus clientes la necesidad de revisar los autos.
Además fueron impuestas multas en el caso de que la empresa incumpla la orden de aviso en los rotativos o se niegue a sustituir las piezas afectadas. EFE