A 3.8 millones de grados Celsius, la corona solar supera en temperatura a la superficie del Astro Rey de nuestro planeta, un dilema que intrigaba a los especialistas de la NASA.
Una de las explicaciones posibles fue confirmada por los estudios realizados con la High-resolution Coronal Imager (Hi-C). Se trataba de chequear que los campos magnéticos que rodean al Sol se entrelazan como los rulos en el cabello de una persona, provocando que la corona eleve su temperatura.
El plasma presente en ciertas zonas provocaría a su vez además el efecto de entrelazado.
El telescopio Hi-C, nueva herramienta de la NASA en el espacio
Hi-C tomó 165 imágenes en algo más de diez minutos, buscando detectar las regiones más activas de la corona y obteniendo resultados nunca antes alcanzados en cuanto a definición.
La idea es también aumentar las chances de estudiar el origen de las tormentas solares.