La devaluación del bolívar frente al dólar en Venezuela causa recelo por sus posibles impactos no solo en sus países vecinos y aliados, sino también en Estados Unidos, donde hay empresas que ya advirtieron de perdidas millonarias por ese motivo.
Como consecuencia de la devaluación que comenzó a regir hoy, el cambio del bolívar pasó de 4,3 a 6,3 unidades por dólar, una pérdida de casi un 32 %, y fuera de Venezuela también surgieron temores.
En Colombia se teme sobre todo un incremento del contrabando en la zona fronteriza, pero también un golpe al intercambio comercial bilateral, que llegó a ser de 7.000 millones de dólares en 2007 y este año se esperaba que llegase a unos 3.000 millones.
El nuevo cambio oficial del bolívar supone un “problema de grandes dimensiones”, según Carlos Luna, portavoz del Comité Intergremial de Cúcuta, la principal ciudad colombiana de la zona fronteriza con Venezuela.
El ministro colombiano de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas, tras reunirse en Cúcuta con empresarios colombianos afectados por la devaluación, anunció que en marzo viajará a Caracas para concertar medidas contra el contrabando.
Brasil, que tiene un elevado superávit en su balanza comercial con Venezuela, resultado de unas exportaciones brasileñas por 5.050 millones de dólares y venezolanas por 996 millones de dólares, puede ser otro de los mayores perjudicados.
En un comunicado de la Cancillería brasileña se mencionó la semana pasada el caso de empresas dedicadas a la construcción civil como Andrade Gutierrez, Camargo Correa, Odebrecht y Queiroz Galvao, que son responsables en Venezuela de “obras de gran tamaño por un valor total superior a los 20.000 millones de dólares”.
Y ni qué hablar de Cuba, que tiene en Venezuela a su principal socio comercial. El comercio bilateral pasó de 200 millones de dólares en 2005 a más de 6.027 millones de dólares en 2010, según datos oficiales.
Las dos naciones firmaron en 1999 un acuerdo de cooperación que permite a la isla pagar parte de los 100.000 barriles diarios de crudo que le provee Venezuela con los servicios de más de 40.000 médicos y técnicos de salud, educación, deportes y asesores en diversos planes sociales.
Analistas económicos independientes cubanos ven a la devaluación del bolívar como un elemento “preocupante” que puede provocar “incertidumbre” a largo plazo.
En EE.UU., el “imperio” como lo llama el presidente venezolano, Hugo Chávez, la segunda devaluación del bolívar en 27 meses puede afectar a firmas como Avon, Colgate, Heinz, Ford y Goodyear, todas las cuales generan alrededor del 3 % de sus ingresos con sus negocios en Venezuela.
La farmacéutica Merck advirtió de que sus ganancias en el primer trimestre se recortarán en unos 5 centavos por acción debido a la devaluación, mientras la empresa proveedora de servicios para la industria petrolera Halliburton calcula una pérdida de 30 millones de dólares relacionada con la depreciación del bolívar.
La devaluación afectará “grandemente” a Panamá, porque Venezuela es el mercado más importante de reexportación desde la Zona Libre de Colón, con cerca de un 20 %, dijo el expresidente de esa zona franca Severo Souza.
En cuanto a México, según analistas de casas de bolsa como Accival y Monex, en Venezuela hay empresas expuestas a un impacto en sus ingresos por la devaluación del bolívar como Gruma, Coca-Cola Femsa y Bimbo, que podrían registrar una ligera depreciación debido a una disminución de sus ingresos medidos en divisas internacionales.
La balanza comercial mexicana con Venezuela en 2011 fue de 2.034 millones de dólares, un 0,27 % del total.
La Unión de Exportadores del Uruguay (UEU) expresó hoy su confianza en que las buenas relaciones del presidente José Mujica con el Gobierno venezolano palíen los posibles efectos de esa medida.
Venezuela pasó a ser el tercer destino en importancia para las exportaciones uruguayas, con un 7,09 % del total, por detrás de Brasil, con el 22 %, y la Zona Franca de Nueva Palmira, en las costas del Río de la Plata, con el 7,17 %.
Nicaragua tiene en Venezuela a su segundo socio comercial. En 2012, exportó al país suramericano 437,8 millones de dólares, principalmente en productos alimenticios, y desde 2007 ha recibido del Gobierno de Chávez 2.231 millones de dólares en cooperación.
Sin embargo, Solón Guerrero, presidente de la Federación de Ganaderos de Nicaragua (Faganic), dijo a Efe que la devaluación de la moneda venezolana probablemente no sea un golpe para su país. “Nuestros productos se exportan y se pagan en dólares, no afecta en nada”, afirmó Guerrero.
Por el contrario, el gerente general del privado Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, señaló a Efe que para las exportaciones bolivianas a Venezuela, que son principalmente de oleaginosas, se crea “un horizonte sombrío”.
En 2012, Bolivia exportó a Venezuela por 321 millones de dólares e importó por 446 millones.
Argentina, otro de los aliados políticos del Gobierno chavista, tuvo en los primeros 9 meses de 2012 un superávit de 1.726,5 millones de dólares en su comercio con Venezuela.
“La devaluación claramente encarece en la moneda local el producto extranjero. No creo que esto implique una caída abrupta de las compras a Argentina, pero algún impacto va a haber”, indicó hoy a Efe el titular de la consultora privada Desarrollo de Negocios Internacionales, Marcelo Elizondo.
En Ecuador, la medida venezolana no afectará significativamente al comercio exterior, según el presidente de la Federación de Cámaras de Comercio del país, Blasco Peñaherrera.
“A Venezuela ni le compramos ni vendemos nada tan importante como para que sea significativa” la relación comercial, aseguró Peñaherrera, quien destacó por el contrario la cercanía de Chávez con el presidente ecuatoriano, Rafael Correa. EFE