Los familiares de los policías colombianos Cristian Camilo Yate y Víctor Alfonso González liberados hoy por las FARC tras 22 días de cautiverio aguardan “con mucha emoción” en Bogotá para reencontrarse con sus seres queridos.
Lubier Yate, padre del patrullero Cristian Camilo, de 21 años de edad, dijo hoy a Efe que las dos familias tienen “una alegría muy enorme” y están ansiosas de recibir a los policías en las próximas horas en el aeropuerto militar bogotano de Catam.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se comunicó por teléfono con los dos patrulleros, según escribió en su cuenta de Twitter: “acabamos de hablar con los dos patrulleros de la @PoliciaColombia Cristian Yate y Víctor González para darles la bienvenida a la libertad”.
El entusiasmo desplazó la decepción que se sintió en Colombia cuando la guerrilla canceló la primera fase del operativo de entrega que estaba prevista para ayer, al parecer porque había demasiados medios en las inmediaciones de la zona de entrega.
El Gobierno colombiano decidió entonces ampliar el plazo de desmilitarización en la zona hasta la medianoche de hoy para permitir que se pudiera reanudar el operativo, y la comisión humanitaria partió desde la ciudad de Cali, capital del Valle del Cauca (suroeste), hasta la vereda de La Cilia, en la vecina región del Cauca.
Hacia el mediodía, los delegados del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y de la ONG Colombianas y Colombianos por la Paz arribaron a ese caserío y recibieron de manos de un grupo de guerrilleros a los dos patrulleros vestidos de civil y con buen aspecto.
Las cámaras del canal venezolano Telesur transmitieron todo el acto en directo y tanto Yate como González agradecieron las gestiones del organismo humanitario, de la sociedad civil, del Gobierno y de los medios de comunicación.
“A mi familia, que me espere, que estoy ansioso. Los amo y fueron mi moral, nunca los saqué de mi cabeza”, sostuvo Yate emocionado.
El CICR practicó la primera revisión médica a los policías en el punto de la entrega y después fueron examinados por un equipo de la Fuerza Aérea antes de partir de la escuela militar Marco Fidel Suárez a la base bogotana de Catam.
Según el CICR, ambos se encuentran en “buen estado de salud” y tan solo tienen dolores en los tobillos y en las rodillas, al parecer por las caminatas que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) les obligaron a hacer, como reconocieron a los medios.
La familia Yate prepara también un recibimiento de honor para el policía en su pueblo natal, Líbano, en el departamento del Tolima (centro), mientras los González organizarán un encuentro en Anserma, Caldas (oeste), de donde son oriundos.
Yate y González fueron hechos cautivos por la columna Gabriel Galvis de las FARC el pasado 25 de enero, al parecer cuando investigaban casos de extorsión en una zona rural ubicada entre las localidades de Palmira y Pradera, en el Valle del Cauca.
El Ejército de Liberación Nacional (ELN), la segunda guerrilla de Colombia, liberó hoy también a cinco trabajadores, tres colombianos y dos peruanos, de una minera canadiense que había secuestrado en el norte del país el pasado 18 de enero. EFE