El presidente uruguayo, José Mujica, reconoció hoy que su Gobierno sufre un “desgaste” y que existen diferencias entre sus integrantes, después de que la Suprema Corte de Justicia del país declarara inconstitucional un polémico impuesto que buscaba evitar la concentración de la tierra.
Mujica se expresó así en una comparecencia de prensa a la salida de una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros que convocó de forma imprevista para tratar esta decisión judicial y la posterior sucesión de declaraciones, en ocasiones contrapuestas, de los miembros del Gobierno.
El mandatario descartó cualquier “cambio de rumbo” ni ninguna modificación “fantástica” en la política económica, tributaria o de fiscalización, tal y como habían especulado diversos medios uruguayos durante la jornada y apuntó que simplemente está tratando que el Gobierno “vuelva a funcionar como un equipo”.
“La vida interna del Poder Ejecutivo, donde hay factores de desgaste, hijos de la naturaleza de las tareas de gobernar, que no son un lecho de rosas, tiene contradicciones, y suelen generar algunos malestares y algunas heridas entre la gente que trabaja. No puede ser de otra manera”, afirmó el veterano político.
Mujica, un exguerrillero tupamaro de 77 años, apuntó que podría decir “otra cosa”, pero que lo mejor era “acercarse a la verdad” y reconocer que el Ejecutivo uruguayo había “tenido problemas de comunicación” que “han lastimado a algunos compañeros”.
El vicepresidente del país, Danilo Astori, responsable de la gestión económica del Gobierno y que desde un principio se opuso al impuesto a la concentración de la tierra (ICIR), tumbado ahora por el alto tribunal, advirtió esta semana de “problemas serios” si otros altos funcionarios seguían proponiendo alternativas sin consultar con el Ministro de Economía, Fernando Lorenzo, su protegido.
“Las cosas que se hacen mal, o se diseñan mal, terminan mal”, agregó en declaraciones al canal 10 de televisión sobre el ICIR.
Mujica llegó a hablar de cambiar la Constitución para que ese impuesto, que gravaba de forma progresiva a los propietarios de más de 2.000 hectáreas con el fin de recaudar fondos para el desarrollo del interior del país, extremo que fue también mal recibido por Astori.
El presidente y el vicepresidente fueron contendientes en la campaña interna del Frente Amplio a las elecciones presidenciales de 2009.
Astori, que fue ministro de Economía del antecesor de Mujica, Tabaré Vázquez, también del FA, pertenece a la corriente socialdemócrata del bloque oficialista de izquierdas, donde conviven agrupaciones políticas tan diferentes como los demócrata cristianos y los comunistas, además de los guerrilleros como el gobernante.
EFE