La Fiscalía de Roma ha abierto una investigación por el caso de la carta del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi enviada a las familias en la que les explica cómo podrán recuperar el dinero pagado en 2012 por el impuesto sobre la vivienda habitual, su promesa electoral estrella.
Según informaron hoy fuentes judiciales, la investigación por el momento no incluye hipótesis de delito y no consta en su registro ninguna persona como investigada.
Estas pesquisas llegan tras la denuncia presentada por el candidato de Revolución Civil a las elecciones regionales de Lacio (centro de Italia) Gianfranco Mascia.
En la denuncia presentada a la Fiscalía hace dos días, Mascia apuntaba a que la coalición de centroderecha que lidera Berlusconi pudo cometer un delito de estafa y de violación del artículo 97 del Texto Único de la Ley Electoral, al plantearse una especie de compra del voto en vísperas de los comicios generales del domingo y el lunes próximos.
La polémica surgió el pasado miércoles, cuando la prensa informó del envío de la carta a las familias italianas, un texto que, al tener el formato de los que envía Hacienda, ha llevado a la confusión a algunos ciudadanos y ha motivado que sus rivales electorales hayan calificado a Berlusconi de “embaucador”.
La devolución de lo pagado por el impuesto sobre bienes inmuebles (IMU) a la primera casa, reintroducido por el tecnócrata Mario Monti en diciembre de 2011, y la supresión del mismo en el primer Consejo de Ministros si llega al poder es la promesa estrella de Berlusconi, que ha basado su campaña electoral en atacar la austeridad impuesta por Europa y rebajar la presión fiscal sobre los ciudadanos.
Berlusconi aseguró que esa devolución de lo pagado por el IMU en 2012 (unos 4.000 millones de euros) y lo que se esperaba recaudar por él en los próximos años se puede compensar mediante un acuerdo con el Gobierno helvético para establecer un impuesto a las actividades financieras de los italianos en Suiza.
Pero esta posibilidad perdió fuerza precisamente este viernes, último día de campaña electoral, cuando se supo que, en la respuesta a una pregunta de una diputada socialista de Suiza, la ministra helvética de Finanzas, Eveline Widmer-Schlumpf, puso en duda que tal acuerdo, si se produce, pueda entrar en vigor antes de 2015.
Ello dificultaría que llegaran esos entre 25.000 y 30.000 millones de euros que Berlusconi buscaba para los próximos años.
Berlusconi, a quien los sondeos internos de los partidos auguran una caída del segundo al tercer puesto como favorito ante el empuje de la antipolítica del cómico Beppe Grillo, según asegura hoy el diario “Corriere della Sera”, tenía previsto cerrar de modo oficial su campaña con un mitin en Nápoles (sur de Italia).
Pero a pocas horas de comenzar, fuentes de su partido, el Pueblo de la Libertad (PDL), informaron de que “il Cavaliere” no asistirá por una “fuerte conjuntivitis” y se limitará enviar al acto un mensaje por vídeo. EFE