Si bien durante 2012 el precio del crudo venezolano se mantuvo en un promedio de 103 dólares por barril, el endeudamiento externo del país siguió creciendo velozmente y registró un salto de 8% en comparación con 2011, ubicándose en US$ 105.799 millones, de acuerdo con las estadísticas del Banco Central, reseña Infobae.
En líneas generales, el incremento de la deuda se produjo porque el Gobierno disparó el gasto hasta niveles récord que superaron con amplitud el ingreso petrolero y la recaudación del Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat), el organismo recaudador de la nación caribeña.
A esta vertiginosa subida del endeudamiento en dólares hay que agregarle el aumento de los compromisos en bolívares, que también treparon continuamente durante 2012.
Para colmo, en un entorno en el cual la deuda ha alcanzado niveles preocupantes y no puede seguir creciendo al mismo ritmo, el 8 de febrero pasado el régimen chavista recurrió a una devaluación para obtener más bolívares por cada petrodólar y así disminuir el desequilibrio de las cuentas públicas.
Al incluir la deuda en bolívares se obtiene que tras la devaluación la deuda total ahora equivale al 70% del Producto Interior Bruto (PIB). Una relación que no es sostenible, y que al igual que en los años que precedieron al viernes negro de 1983 se ha disparado en medio de un ciclo de elevados precios del petróleo, según publica el diario venezolano El Universal.
No obstante, en el cuarto trimestre del año pasado la economía alcanzó un avance de 5,5% y en total, durante 2012, se registró un alza de 5,6 por ciento. Esto a pesar de que el sector industrial, un área clave en la creación de empleo y esencial para alcanzar la meta de diversificar las exportaciones, apenas subió el 1,1 por ciento.
Venezuela es el país con la tasa de inflación más elevada de América del Sur desde que las políticas chavistas establecieron un sistema de control de cambios y de precios, el país ha registrado tasas de aumento de precios superiores a 20% anual, 4 devaluaciones, un avance imparable del Estado en el control de la economía y las nacionalizaciones de empresas que, en la actualidad, se encuentran al borde del colapso.
La renta financiera generada por el precio del petróleo, cuyos precios se elevaron de US$25 el barril en 2003 a récords que superaron los US$100 en 2008, le ha permitido a Venezuela obtener ingresos extraordinarios con lo que el socialismo chavista disparó el gasto público y los subsidios a los sectores postergados que son la base que sostiene el modelo.
El problema de Venezuela es que para la reelección de Hugo Chávez en 2012, el gasto público se disparó por encima de los ingresos petroleros y eso obligó al estado a emitir más deuda.