La refinería de Amuay, la mayor de Venezuela con 645.000 barriles por día (bpd) de capacidad, prevé volver a poner en servicio a finales de abril la unidad de destilación que resultó dañada en un severa explosión el año pasado, dijo el jueves la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) en un comunicado.
La ignición de una nube de olefinas causó en agosto el más severo accidente en la historia de la industria petrolera local, al dejar más de 40 muertos y severos daños dentro y fuera del Centro Refinador Paraguaná (CRP), el segundo mayor del mundo con 955.000 bpd e integrado por las refinerías Amuay y Cardón.
“La destiladora número 5 estará en funcionamiento a finales de abril con 185.000 bpd de procesamiento. Llegaremos a un total de 736.000 bpd”, dijo el vicepresidente de refinación PDVSA, Asdrúbal Chávez, según un comunicado difundido por la empresa.
El documento añade que el CRP está procesando en la actualidad 588.000 bpd de crudo, un 61,5 por ciento de su capacidad instalada de 955.000 bpd, luego de que este mes el flexicoquer tuviera que ser detenido para un mantenimiento de un mes debido a repetidas fugas en las líneas de transmisión.
Un reporte interno de PDVSA obtenido por Reuters reveló en enero que el CRP estaba operando a un 57 por ciento de su capacidad, menos que en los meses posteriores a la explosión, debido a decenas de paradas programadas y fortuitas de unidades en las dos refinerías que lo integran.
La Administración de Información de Energía de Estados Unidos reportó que las compras de derivados hechas por Venezuela a ese país subieron a un máximo histórico de 197.000 bpd en diciembre, incluyendo gasolina de motor, oxigenantes para gasolina, fuel oil y otros combustibles.
Chávez dijo, no obstante, que Venezuela no está importando gasolina terminada en este momento.
“En 2012 invertimos 1.257 millones de dólares en mantenimiento, 604 millones de dólares en mantenimiento de rutina y 653 millones en mantenimiento mayor”, agregó Chávez para rechazar críticas sobre el bajo nivel de recursos que la estatal habría dedicado a sus refinerías en los últimos años.
Tras la explosión de Amuay, las tareas de reparación el CRP se han concentrado en los patios de tanques que resultaron más afectados, pero las fallas y paradas no programadas de unidades medulares de proceso han sido recurrentes.
Chávez dijo que el circuito doméstico de refinación de PDVSA y la refinería Isla que opera la estatal en Curazao están procesando alrededor de 1 millón de bpd, de un total de 1,65 millones de bpd de capacidad instalada.
Reuters