El presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, fue acusado por la fiscalía brasileña de fraude en la organización del amistoso Brasil-Portugal en 2008, contratada con dinero público sin licitación y para la que supuestamente se falsificaron documentos, informó el martes el diario Folha de Sao Paulo.
El gobierno del Distrito Federal (DF) habría pagado a la empresa brasileña Ailanto Marketing, propiedad de Rosell, 9 millones de reales (unos 4 millones de dólares en la época), sin licitación para organizar el partido, en que Brasil goleó a Portugal por 6-2.
Folha indicó que la denuncia se presentó ante la justicia en febrero.
Rosell y su socia, Vanessa Precht, responderán por fraude de documentos y por aceptar un contrato sin licitación. La fiscalía presume que ambos sabían que la contratación era ilegal e igual se beneficiaron de ella.
Los delitos son pasible de hasta ocho años de prisión, según destacó la prensa.
El gobernador del DF en la época, José Roberto Arruda, también fue imputado.
Es la primera denuncia en la esfera penal que se hace sobre este caso, pues ya se iniciaron otras acciones en tribunales civiles.
En 2009, la fiscalía investigó iregularidades y sobrecostos en la organización del juego, vinculando también al expresidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ricardo Teixeira.
Teixeira estaría vinculado además a Ailanto, según Folha.
La denuncia indica que la empresa habría falsificado además un documento para demostrar la capacidad técnica de la empresa -fundada cinco meses antes del partido- para organizar el evento.
La constancia fue emitida por Bonus Sports Marketing, también propiedad de Rosell.
Consultada por la AFP, la fiscalía dijo que “no está autorizada a hablar del caso” porque el tribunal que lleva la causa “decretó el sigilo judicial”.
El abogado de Rosell en Brasil, Antenor Madruga, catalogó la denuncia de “irresponsable y vergonzosa”, alegando que Ailanto tenía los derechos del partido.
“El gobierno contrató a Ailanto porque tenía los derechos del juego. Es una cuestión de propiedad, no de si tenía capacidad. O compraban los derechos o no había juego”, explicó.
Madruga explicó que Ailanto se creó para agilizar los negocios de Rosell en el país. Las facturas por los 9 millones de reales eran la 001 y 002 de Ailanto, lo que despertó sospechas de la fiscalía.
La defensa del exgobernador Arruda dijo que al Ailanto tener la propiedad de los derechos no era necesaria una licitación.
Sandro Rosell asumió la presidencia del Barça en julio de 2010.
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