La justicia española recibió algunos documentos que dan a entender que la hija del Rey, la infanta Cristina, podría estar al corriente de las actividades presuntamente corruptas de su marido, según unos extractos publicados este miércoles por la prensa.
AFP
La infanta Cristina, la hija menor del rey Juan Carlos, nunca ha estado amenazada por la investigación por presunta corrupción iniciada hace un año por el juez José Castro contra su marido, Iñaki Urdangarin, antigua estrella de balonmano con el que se está casada desde 1997.
La pesquisa analiza el presunto desvío de varios millones de capital público a través del instituto Nóos, una sociedad de mecenazgo presidida por Urdangarin entre 2004 y 2006.
Interrogado por segunda vez en un año por el juez Castro el pasado 23 de febrero en Palma de Mallorca, en las Baleares, el yerno del Rey trató de proteger a la familia real y a su esposa de cualquier implicación con sus sospechosas actividades profesionales.
Pero su antiguo socio Diego Torres, también imputado en el caso, lleva semanas revelando documentos al juez para conseguir justo lo contrario, salpicar a la Casa Real.
Esta vez, según el periódico El Mundo, la defensa de Diego Torres remitió al tribunal de Palma de Mallorca un nuevo paquete de 30 correos electrónicos que, afirma el diario, “detallan como el Duque explicaba a su mujer detalles del funcionamiento y los negocios de Nóos ya que ella formaba parte de su junta directiva”.
En uno de estos correos con fecha del 20 de febrero de 2003 y atribuido a Urdangarin, reproducido por los rotativos El Mundo y El País, el duque de Palma se dirige a la infanta Cristina y le pide consejo sobre un documento que había redactado para sus clientes y colaboradores.
En febrero, la prensa ya divulgó algunos correos atribuidos a Iñaki Urdangarin que parecían indicar que el Rey había apoyado y seguido de cerca los negocios de su yerno.