Una manicura de 22 años, que confesó haber secuestrado y matado al hijo de seis años de su presunto amante en el estado de Rio para vengarse por el fin de la relación, es acusada de homicidio triplemente calificado y ocultación de cadáver, informó la policía.
Suzana de Oliveira fingió ser la madrina de Joao Felipe Eiras Santana Bichara para recogerlo el lunes de un colegio católico de clase media alta en el municipio de Barra do Piraí (sur del estado de Rio), de 100.000 habitantes.
Según su confesión a la policía consignada por el diario O Globo, la manicura, que es amiga de la familia del pequeño, llevó al niño en taxi a un hotel en el centro de la ciudad, donde dijo que lo asfixió con la ayuda de un empleado. Pero la policía no cree en su versión de que actuó con cómplices.
Tras el crimen, la acusada, que no posee antecedentes judiciales, salió del hotel con el cuerpo del niño envuelto en una frazada como si estuviera dormido, y lo llevó a su casa, donde rasgó, cortó y tiró sus ropas, y escondió el cadáver en una maleta.
Horas después, la policía militar halló el cuerpo del niño en la casa de la manicura.
La prensa local indicó asimismo que De Oliveira llegó a consolar a la madre de la víctima, de la que era manicura hace tres años, por la desaparición del pequeño. La acusada fue detenida por la policía en la casa de los padres del niño, que son propietarios de una inmobiliaria.
Durante su confesión, la acusada “no lloró ni un momento y demuestra ser envidiosa, además de haber premeditado el crimen”, dijo el policía Mario Omena, de la comisaría local, a Globo. Puede ser condenada a más de 30 años de cárcel, afirmó.
De Oliveira, que es soltera y no tiene hijos, fue trasladada a la prisión de máxima seguridad de Bangú.
AFP