En el extenso vocabulario recogido en el diccionario de la Real Academia Española podemos encontrar muchas curiosidades. Entre ellas, las palabras más largas –electroencefalografista, con 23 caracteres– o los vocablos cotidianos que son marca registrada – por ejemplo, jacuzzi–. Por supuesto, también hay un hueco para las «palabras feas», bien sea por su significado o por la unión de letras que no suenan del todo bien a nuestro oído.
Internet es un hervidero de foros sobre cuáles son las expresiones menos agraciadas del castellano. De hecho, se puede encontrar un grupo en Facebook dedicado a esta temática. Y parece que las opiniones son de lo más variopintas. Para la realización de este artículo –sin validez científica alguna– se seleccionaron las palabras que los internautas solían destacar como malsonantes. Con ellas, se elaboró una encuesta sobre cuáles eran, de entre las opciones, los vocablos más feos. ¿El resultado? Muy llamativo. En la primera posición del ranking aparece «seborrea» –39 por ciento de los votos–, un término que además de no sonar agradable conlleva un significado aún menos apetecible.
La medalla de plata se la lleva «boñiga» –21 por ciento–, seguida muy de cerca por otro vocablo que también se escribe con «ñ»: gurruño –20 por ciento–. Sin esta letra propia del castellano, aparecen varias de palabras que hacen referencia a enfermedades: escorbuto, colitis, diarrea o prurito están entre ellas. También términos relativos al organismo se hacen un hueco: sobaco, carraspera, inguinal y ganglio.
Pero no todas las palabras están relacionadas con aspectos poco saludables o referentes al cuerpo humano. Los encuestados quisieron añadir a la lista proporcionada algunos términos que no aparecían en el ranking y que consideraban malsonantes. «Catacumba», «petulante» y «recoveco» también quedan recogidos entre algunos de los vocablos elegidos por los internautas como los más cacofónicos del castellano. / ABC.es