Estados Unidos condenó hoy el atentado contra la embajada francesa en Trípoli que dejó dos gendarmes heridos y afirmó que es un “ataque directo” a todos los libios. El ataque se produjo en horas de la mañana, luego de que un carro bomba estallara frente al recinto francés, reseñó EFE.
“Esta violencia es un ataque directo a todos los libios, quienes llevaron a cabo una revolución para disfrutar de un futuro democrático con seguridad y prosperidad”, aseguró Patrick Ventrell, portavoz adjunto del Departamento de Estado de EE.UU. en su rueda de prensa diaria.
El funcionario expresó sus condolencias a los heridos y reiteró que Francia es uno de los “aliados más estrechos” de EE.UU. “en la promoción de la paz y el desarrollo alrededor del mundo”.
Asimismo, expresó el deseo de que “el Gobierno de Libia continúe con sus esfuerzos para fortalecer la seguridad en el país”.
Ventrell sostuvo que “aunque existen varias restricciones de seguridad en la embajada estadounidense de Trípoli (…), esta sigue abierta”.
La situación de inseguridad en Libia, que se ha prolongado tras la caída del régimen de Muamar al Gadafi, en octubre de 2011, empujó a varias embajadas occidentales recientemente a alertar a sus ciudadanos sobre los riegos de viajar al país norteafricano.
Desde entonces, varias misiones diplomáticas han sido blanco de ataques o atentados en el país.
El ataque más grave se produjo el pasado 11 de septiembre contra el consulado estadounidense en Bengasi, en el que perdieron la vida el embajador, Christopher Stevens, y tres funcionarios de la misma nacionalidad. EFE