El asesor de víctimas de accidentes aéreos, William Dugarte, rechazó las declaraciones emitidas por los representantes legales de la empresa propietaria del avión Learjet 60, matrícula estadounidense N119FD, siniestrado el pasado domingo en Valencia, estado Carabobo.
Como se recordará, el abogado Julio Sánchez Vegas declaró que “el nombre (de la compañía) es lo de menos… aquí no se va a reparar nada, les daremos sus reales y firmaremos un finiquito”, causando malestar entre quienes se vieron afectados por el suceso.
Dugarte calificó de apresuradas tales afirmaciones, pues apenas está comenzando el proceso legal de investigación, por lo que cualquier ofrecimiento que se le haga a los afectados en este momento “podría ser con el fin de conducirlos a la violación de sus derechos”.
El experto criticó también el misterio con el que se maneja el caso en lo referente al nombre de la compañía dueña de la aeronave, “¿Por qué lo ocultan? Los víctimas están en el derecho de saberlo así que exigimos transparencia en este punto”.
Asimismo, recordó que los habitantes de Parque Valencia sufrieron además de cuantiosas afectaciones que van desde la pérdida de sus viviendas, enseres, vehículos y también daños psicológicos por el terrible momento que les tocó afrontar, hasta una serie de incomodidades dadas por el hecho de no tener dónde vivir, lo cual les continuará generando molestias que van más allá de los costos materiales.
“Nos parece irrespetuosa la manera en que ellos (los representantes de los dueños del Learjet 60) se dirigieron a las personas y abordaron la situación pues fue despectiva, porque son ciudadanos que están pasando por un momento muy difícil, sus vidas estuvieron en peligro y hoy no tienen casa o perdieron otras pertenencias, así que exigimos respeto en el trato a estos venezolanos”.
“Debe aclararse en su totalidad mediante un proceso transparente por qué ocurrió el accidente, para determinar responsabilidades y por sobre todo evitar que algo así vuelva a suceder, enlutando a dos familias de pilotos venezolanos o causando daños e impacto en la comunidad como acabamos de ver”, remarcó.
En el mismo sentido, Dugarte anunció que no descarta tomar parte del caso para colaborar con el proceso de esclarecimiento, apoyando con la experiencia que ha acumulado en investigaciones de accidentes aéreos y asesoría de víctimas nacional e internacionalmente, en tragedias como las de los vuelos 518 de Santa Bárbara Airlines, 2350 de Conviasa y 5428 de Sol Líneas Argentinas.
“Insistimos en alertar a los afectados de que no deben firmar ninguna oferta y finiquito, porque podrían estar siendo conducidos a la violación de sus derechos y por ende a no obtener justicia. Es importante que las víctimas conozcan los procesos y sus derechos en este tipo de casos que no son comunes en Venezuela”, concluyó.