El ministro de Relaciones Exteriores, Elías Jaua, sostiene este miércoles una reunión con el Enviado Especial Plenipotenciario de Cambio Climático de la República de Polonia, Tomas Chruszczow, con el objetivo de abordar temas relacionados con el nuevo acuerdo jurídico que sustituirá el Protocolo de Kyoto y el rol de Venezuela, junto a los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), en estas negociaciones. AVN
El encuentro se desarrolla en la cancillería venezolana, en Caracas, y además cuenta con la participación de la Enviada Especial Plenipotenciaria de Cambio Climático de Venezuela, Claudia Salerno, indica una nota del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Este año Polonia será sede y presidirá la XIX Conferencia de las Partes (COP19), razón por la cual Chruszczow comenzó una gira de consultas diplomáticas por varios países que consideran clave para el logro del nuevo acuerdo global sobre clima, agrega la información.
El Protocolo de Kyoto es un acuerdo internacional, adoptado por 187 países en 1997, en el cual se estableció un conjunto de compromisos de reducción de emisiones de gases invernadero (que causan el calentamiento global) para los países desarrollados, por un período inicial de cinco años, con miras a actualizar tales compromisos en períodos subsiguientes y solventar con ello el problema del cambio climático.
En la XV Conferencia Internacional de la Organización de Naciones Unidas sobre Cambio Climático realizada en Copenhague, Dinamarca, en 2009, el comandante Hugo Chávez expresó: “No cambiemos el clima, cambiemos el sistema y en consecuencia comenzaremos a salvar el planeta. El capitalismo, el modelo de desarrollo productivo, está acabando con la vida, amenaza con acabar definitivamente con la especie humana”.
El líder de la Revolución Bolivariana dio esas declaraciones en referencia a las consignas populares manifestadas en las protestas que rodearon aquella cumbre, ante la negativa de las grandes potencias de hacer aportes significativos contra el calentamiento global.