Carlos Novoa Zambrano (37) no aguantó los celos y el mismo día que su hijo cumplió cinco añitos decidió pegarle cinco tiros a su esposa, Yeniré Paola Cohen García (29), y luego se suicidó de un disparo en la cabeza. laverdad.com / Luisana González
La pareja quedó tendida en el garaje de su vivienda ubicada en la calle 199, lote B de la urbanización El Caujaro, en el municipio San Francisco. Cohen yacía boca abajo junto al portón de la vivienda por donde trato de escapar y Novoa estaba boca arriba a unos metros de ella.
Los testigos contaron a la prensa que todo comenzó el viernes, cuando ella recibió un mensaje de texto en su celular, donde un presunto funcionario de la Policía científica le preguntó: “¿Ya llegaste a tu casa?” y Novoa lo leyó.
“Yeniré tenía los ojos rojos e hinchados, se notaba que había llorado mucho”. Al parecer su cónyuge, en esos cinco días que pasaron luego de haber visto el mensaje, la amenazaba cada noche con su pistola. Se desconoce si el arma de fuego era propia.
Ayer, a las 5.00 de la tarde, Novoa y su niño llegaron a su vivienda. El pequeño corrió al hogar de su vecinita a jugar. Su padre entró a la casa y consiguió a Yeniré en la cocina, freía unos tequeños junto con su mejor amiga, Yusmari Montaño, para la fiesta de su hijo que celebrarían en unas horas.
Novoa le dijo a Montaño que le había traído un detalle y que se fuese a la habitación a medírselo. Luego, Yusmari empezó a escuchar una discusión muy fuerte. Escuchó un portazo y cómo se alejaban los gritos a la calle, pero no se atrevió a moverse. Pasaron tres minutos y escuchó unos disparos. Le dio miedo y corrió al estacionamiento. Allí observó cuando Novoa se quitaba la vida.
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