Ford Motor Co. anunció el jueves que cerrará sus dos fábricas de automóviles en Australia y terminará la producción en el país en 2016 debido al aumento en los costos de manufactura y el desplome en las ventas.
El cierre de las plantas del fabricante estadounidense en el estado de Victoria significará la pérdida de 1.200 empleos y transformará a la compañía en sólo una marca importada en Australia. Ford comenzó a fabricar automóviles en Australia en 1925 y es el tercer fabricante de autos más grande en el país.
“Comprendemos el impacto real que esto tendrá en nuestro equipo”, dijo a reporteros el presidente de Ford Australia Bob Graziano. “Llegamos a esta conclusión sólo después de revisar a fondo nuestro negocio y de agotar todas nuestras alternativas”, agregó el directivo en la planta de la empresa en Melbourne.
El persistentemente alto dólar australiano ha puesto presión a los fabricantes de automóviles del país, pues hace que los vehículos fabricados localmente sean mucho más caros que los fabricados en el extranjero. El mes pasado, el principal competidor de Ford, Holden, dijo que recortaría 500 empleos debido al costo del dólar australiano y la caída de la demanda.
“La fortaleza del dólar australiano avanza sobre la manufactura australiana y ciertamente crea un ambiente difícil para que prospere”, dijo la primera ministra australiana, Julia Gillard, después del anuncio de Ford.
El fabricante automotriz presentó además su reporte financiero anual, el cual mostró una pérdida de 141 millones de dólares australianos (136 millones de dólares estadounidenses) después de impuestos para el año fiscal 2012. Esto sigue a una pérdida de 290 millones de dólares australianos en 2011 y una pérdida total de 600 millones de dólares australianos en los últimos cinco años.
Graziano dijo que una demanda reducida de autos grandes y el alto precio de producción en Australia han hecho que la operación manufacturera sea poco competitiva. Los costos de producción de Ford en Australia son del doble con respecto a Europa y casi el cuádruple frente a Asia, afirmó Graziano.
Aproximadamente 1.500 empleados, incluidos distribuidores y quienes trabajan en desarrollo de producto, continuarán laborando para la compañía después de que termine la producción en octubre de 2016. AP