El presidente estadounidense, Barack Obama, aseguró este lunes a sus aliados europeos que proporcionará “toda la información” solicitada sobre las actividades de espionaje electrónico de su país que habrían afectado a instituciones de la Unión Europea y a millones de ciudadanos europeos.
Mientras tanto, el ex analista de inteligencia estadounidense Edward Snowden, quien hizo las revelaciones que están en el origen del reclamo europeo, pidió asilo político en Rusia, declaró el lunes a la AFP un responsable del servicio consular ruso.
Washington continúa “evaluando” las acusaciones de Snowden, que fueron publicadas por medios de prensa europeos, y Estados Unidos se “comunicará (después) de manera apropiada con sus aliados”, aseguró Obama, de visita en Tanzania.
Ante la indignación de los europeos, Estados Unidos trata de relativizar el tema, mientras que Bruselas ha advertido incluso sobre las consecuencias que el caso podría tener en las negociaciones para crear una zona de libre comercio transatlántico.
Sin evocar directamente el caso, el presidente francés, François Hollande, dijo que “no podemos mantener negociaciones o transacciones” con Estados Unidos antes de obtener “garantías” sobre el cese del espionaje a la Unión Europea y a Francia.
“No podemos aceptar ese tipo de comportamiento entre socios y aliados”, dijo Hollande este lunes. “Pedimos que cese inmediatamente”, agregó el presidente francés.
“Tenemos suficientes elementos para pedir explicaciones”, añadió.
Por su parte, el presidente del parlamento europeo, Martin Schulz, dijo que “si se demuestran estas acusaciones, sería un problema extremadamente grave que perjudicaría considerablemente las relaciones entre la Unión Europea y Estados Unidos”. “El Parlamento europeo no debe ser tratado como un enemigo”, agregó.
“Si se confirma que los estadounidenses han espiado a sus aliados, habrá consecuencias políticas. Esto va más allá de las necesidad de seguridad nacional. Es una ruptura de la confianza y es algo muy grave”, dijo a la AFP un responsable europeo.
En Alemania, un portavoz del gobierno alemán, Steffen Seibert, dijo que Estados Unidos debe “restablecer la confianza” con sus aliados europeos. “Una discusión tendrá lugar pronto” con la canciller Angela Merkel, añadió.
Por otra parte, Bélgica, Grecia y Austria reclamaron también explicaciones a Washington.
“Rusia no entrega nunca a nadie”
El domingo, el semanario alemán Der Spiegel reveló que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense espía desde hace varios años a instituciones europeas en Estados Unidos, pero también en Bruselas. Dentro de la UE, Alemania es, según el semanario, un blanco privilegiado.
Der Spiegel apoyó sus acusaciones en documentos confidenciales que pudo conocer gracias a las filtraciones de Snowden, reclamado por la justicia de su país por haber revelado este programa.
Por su parte, el diario británico The Guardian afirmó el domingo que Francia, Italia y Grecia estaban entre los 38 “objetivos” vigilados por la agencia estadounidense.
El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo este lunes que no entregará a Snowden, que se encuentra bloqueado en la zona internacional del aeropuerto Sheremetievo en Moscú, porque “Rusia no entrega nunca a nadie”.
“Si (Snowden) quiere quedarse aquí, la condición es que cese sus actividades que perjudican a nuestros socios estadounidenses”, o sino debe “escoger un país a donde irse”, añadió Putin.
En cuanto al programa de espionaje estadounidense, Putin dijo que “el hecho de que los aliados (occidentales) se espíen los unos a los otros, no es nuestro problema”. “Que hagan lo que quieran”, declaró.
El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que se entrevistó este lunes en Brunei con la responsable de la diplomacia europea, Catherine Ashton, trató de relativizar este caso.
“Puedo decir que todos los países del mundo que están implicados en asuntos internacionales, de seguridad nacional, emprenden numerosas actividades para proteger su seguridad nacional, y tener todo tipo de información contribuye a ello”, explicó.
“Colaboramos con Europa en tantos temas”, dijo por su parte Ben Rhodes, asesor adjunto de seguridad nacional del presidente Obama. “También compartimos muchos valores democráticos que, creo, pueden trascender cualquier controversia”, agregó.