Nada más ingresar Catalina en la maternidad, los corredores de apuestas se precipitaron para hacer las últimas cábalas sobre el sexo y el nombre del bebé real, e incluso sobre el vestido que llevará Pippa cuando visite a su hermana.
En solo tres horas el lunes por la mañana, la empresa británica Paddy Power registró 35.000 euros en apuestas.
“El dinero entra a raudales desde que los corredores de apuestas patrióticos se despertaron con el anuncio del inicio (del parto)”, comenta Paddy Power.
“Es increíble. Es una suma poco habitual en el mercado”, si se excluyen los deportes, añade la AFP un portavoz de la empresa, Rory Scott.
En total, el nacimiento inminente del bebé real, tercero en línea de sucesión al trono, ha sido objeto de más de un millón de euros en apuestas. Se trata del mayor mercado jamás registrado para un evento no deportivo en Gran Bretaña, país adepto de las apuestas.
Como prueba de este entusiasmo, una empleada de la empresa Coral desfilaba el lunes por la mañana delante de la maternidad londinese de St Mary, donde debe dar a luz Catalina, con una pancarta que daba la última hora de cómo estaban las apuestas: una niña a 1 contra 2, un niño a 6 contra 4.
Pero el mercado más activo es de los nombres. Alexandra encabeza la lista, seguida por Carlota y Victoria. Pero nombres más chapados a la antigua, como Marta y Matilda, también se sitúan entre las apuestas de William Hill.
Isabel, nombre de la reina, y Diana, el de la fallecida madre del príncipe Guillermo, padre del bebé, también están en la lista, pero lejos por detrás del trio de cabeza.
Si es niño, Jorge llega en cabeza, seguido por Jacobo (James), el nombre del hermano de Catalina.
Las apuestas sobre la fecha del nacimiento por su parte se suspendieron el lunes. “Solo el 5% de las apuestas se hicieron sobre la fecha de hoy”, según un portavoz de William Hill. “Si el bebé nace hoy, quienes hayan apostado por esta fecha van a ganar una buena cantidad”, asegura Rory Scott, quien no avanzó sin embargo ninguna cifra.
Las apuestas más alocadas seguían el lunes, entre otros sobre el color del vestido de Pippa, la muy mediática hermana de Catalina, cuando visite la maternidad. Será de color crema, según los corredores de apuestas.
Los aficionados de las apuestas también podían entretenerse imaginando la edad del futuro heredero cuando acceda al trono o cuando él o ella será fotografiado en una discoteca.
Las apuestas también se hacían sobre el nombre de los padrinos y madrinas, con los “sospechoso habituales”, incluido el futbolista David Beckham, amigo íntimo de la pareja, Pippa y el príncipe Enrique, hermano de Guillermo.
Este mercado, muy lucrativo, parecía sin fin dado que empresas apostaban también sobre el año de nacimiento del “bebé número 2”.
AFP