Tres millones de católicos que abarrotaban la playa carioca de Copacabana bailaron al unísono una coreografía en homenaje al papa Francisco antes de la misa de cierre de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
Sacerdotes, obispos, religiosos y la multitud de personas que ocupa la arena, muchas de los cuales pernoctaron allí mismo al raso, realizaron los pasos sencillos levantando brazos y saltando.
Lo ensayaron hoy mismo en la playa antes de la llegada del pontífice y en las últimas semanas gracias a un vídeo colgado en la red social Youtube.
Los responsables de la idea afirmaron que pretendían batir el récord del mayor “flashmob” del mundo, como se conoce a las coreografías realizadas por un grupo de forma intempestiva en un lugar público para después disolverse.
Sin embargo, en este caso los fieles realizaron el baile sin llegar de improviso ni disolver la concentración una vez que se terminó la canción, titulada “Francisco” y compuesta para la ocasión.
La canción hablaba de “la bendición” que trae el pontífice y “la esperanza de amor y de paz”.
El director artístico Edson Erdmann, responsable de los actos en el Campus Fidei, explicó que la coreografía era “simple” para facilitar que se la aprendieran todos los peregrinos.
Según los organizadores, tres millones de personas se congregaron hoy en la playa para el último acto de la JMJ. EFE