La familia del opositor cubano Oswaldo Payá, fallecido junto a Harold Cepero en un accidente automovilístico el 22 de julio de 2012, presentará una querella ante un tribunal español para investigar la muerte, informó este martes a la AFP su hermano Carlos. AFP
“Vamos a presentar la querella al tribunal de la Audiencia Nacional”, la máxima instancia judicial en España, indicó Carlos Payá en una conversación telefónica, explicando que la muerte puede denunciarse ante la justicia española porque su hermano, de 60 años, tenía la nacionalidad de este país.
El lunes, el joven político conservador español Ángel Carromero, que sobrevivió a ese accidente junto al político sueco Aron Modig, que dijo estar dormido en ese momento, asegurara en el diario El Mundo que “los servicios secretos cubanos asesinaron a Oswaldo Payá” que, según él, “salió vivo del accidente”.
Al volante del vehículo en el momento en que se salió de la carretera cerca de la localidad cubana de Bayamo, Carromero, de 27 años, fue condenado por la justicia cubana a cuatro años de cárcel por homicidio imprudente y actualmente cumple su pena fuera de prisión en España.
“El testimonio de Ángel Carromero es importante porque es el testigo principal y es una víctima también. Pero hay más testimonios”, dijo Payá, que ha exculpado al político español desde el principio.
El hermano del líder opositor cubano, que no detalló contra quien dirigiría la demanda ni cuando sería presentada, señaló que “lo que queremos es la verdad porque tenemos dudas desde el primer momento”.
“La primera información que nos llega a nosotros, antes de saber que Oswaldo Payá iba en ese vehículo, era que el coche había sido golpeado y sacado de la carretera”, afirmó.
“Las pruebas periciales son incoherentes. Nosotros tenemos información de otras personas de que Oswaldo no murió en el acto como afirma el gobierno cubano. También es incomprensible que personas que vieron su cadáver dicen que el cuerpo estaba intacto y la cabeza destrozada”, añadió.
La muerte de Payá, sobre la que su familia sigue pidiendo una investigación internacional independiente, dejó a la oposición cubana sin su principal líder.