El secretario de Seguridad y Orden Público del estado Zulia, Jairo Ramírez, confirmó, la mañana de este jueves, otros seis fallecidos tras más de 10 horas de intensa balacera en la Cárcel Nacional de Maracaibo (Sabaneta), publica Panorama.
La situación irregular se registró este miércoles, en la que un recluso del área de Reeducación resultó muerto y otro herido. Versiones no oficiales indicaron que eran dos los fallecidos. Con este nuevo balance, habrían, hasta ahora, ocho muertos.
Ramirez indicó que la situación se normalizó la mañana de este jueves.
La fuerte reyerta comenzó en el área Máxima del penal, presuntamente por el control del área, tras la muerte del cabecilla Pedro Caldera, quien fue abatido por el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), en el barrio Los Robles de Maracaibo, la noche del domingo.
El general Luis Morales Guerrero, jefe del Comando Regional Número Tres de la Guardia Nacional Bolivariana, manifestó: “Están todos los cuerpos de seguridad presentes, tenemos desplegados más de 400 oficiales de la Guardia Nacional Bolivariana en la seguridad externa. No tenemos el balance completo, pero, hasta ahora, hay un solo interno fallecido, es una situación irregular en la parte interna”.
Al sitio se presentaron autoridades militares y policiales para tratar de mediar en el conflicto. “Aún no podemos precisar la cantidad de personas fallecidas”, dijo Jairo Ramírez, secretario de Seguridad y Orden Público del estado, desde el interior del penal en horas de la noche de ayer.
Ramírez aseguró a las 11:00 de la noche que la situación ya estaba calmada “Desde tempranas horas de hoy (ayer), se presentó un enfrentamiento entre los privados de libertad que gracias a las negociaciones ya fue solventada”, precisó.
“En la operación se pudo rescatar a 30 reos que fueron atendidos en el destacamento 35 de la Guardia Nacional. Algunos están heridos levemente. Serán trasladados a tempranas horas a otro centro penitenciario”, detalló.
Extraoficialmente se conoció que uno de los reos muertos es Jackson Andrés Muñoz Villada, de 24 años, quien recibió un disparo en el cuello por una bala perdida, ya que éste estaba recluido en el área de Reeducación.
El tiroteo, que inició a las 6:00 de la mañana, se registró presuntamente entre reclusos pertenecientes al grupo de “escoltas” de Pedro Caldera y otra banda denominada “Los Corianos”.
“La guerra se inició entre un grupo de reclusos de Falcón en contra del segundo y tercer cabecilla de ‘Máxima’ por el liderazgo del área, tras la muerte de ‘Caldera”, aclaró una fuente extraoficial.
Tras la reyerta, a las 9:30 de la mañana, el cuerpo de Muñoz, fue sacado del penal por los mismos reclusos, mientras las constantes detonaciones continuaban en el interior de la cárcel.
Yeskibel Díaz, aseguró que su cuñado, Hebert Martínez, recluido en la zona en conflicto, fue herido a balazos en sus piernas.
“Al principio creíamos que estaba muerto, pero se está desangrando y nadie le presta auxilio. Además, mi hermana está adentro, junto con mis tres sobrinos de un mes, seis, y nueve años”, denunció la mujer. Anoche, a las 8:30, la familia de Martínez dijo a la prensa que este había fallecido.
La balacera se calmó en horas del mediodía, luego de que los reclusos bajaran sus armas. Desde afuera se escuchaba: “Tenemos el poder”, en repetidas ocasiones, mientras adentro tocaban los tambores. Dos tanquetas del Destacamento de Seguridad Urbana (Desur) entraron al recinto y los militares bordearon todas las áreas para tratar de controlar la situación.
A las 3:50 de la tarde, la plomazón continuó. Voceros policiales aseguraron que reos del área de Penal abrieron un boquete en “Máxima” para tratar de sacar a la visita que presuntamente estaba “secuestrada” desde el domingo.
Los internos y varias mujeres, que se presume sean de la visita, se apostaron en el techo y tomaron a un bebé de meses y a una niña, de entre 4 y 6 años.
Según informó el secretario Jairo Ramírez, los niños fueron sacados alrededor de las 10:00 de la noche de la cárcel. “En total eran cuatro niños los que se encontraban dentro. Fueron trasladados a un hospital para hacerle los chequeos médicos”.
“No tienen corazón. Cómo van a jugar así con la vida de esas criaturas”, decía entre lágrimas una pariente de un interno de Reeducación.
Más de 100 familiares estaban en el parte trasera del área donde se registró la balacera. Corrían de un lado a otro y suplicaban por la vida de sus familiares. “Estamos aquí desde esta mañana y queremos saber de ellos. Solo pedimos paz y que cesen las balas”, suplicó una desesperada madre.
El reo Jackson Muñoz estuvo recluido en el retén El Marite y se evadió en mayo del 2012, junto con ‘Chicho Loco”, señaló un policía. Luego, fue recapturado y enviado a la cárcel.