El español Rafael Nadal, que acaba de recuperar el segundo puesto de la clasificación mundial ATP, aseguró hoy que tiene la “actitud correcta” para jugar el Abierto de Estados Unidos que arranca este lunes, en el que estuvo ausente el año pasado por su lesión de rodilla.
“El año pasado vi este evento en la televisión, este año tengo la oportunidad de jugar y eso es increíble”, declaró el mallorquín en una conferencia de prensa durante la celebración del Arthur Ashe Kid’s Day, un evento que sirve como inauguración del torneo y al que acudió la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama.
Nadal reconoció que está teniendo una temporada “increíble” y que llega al último Grand Slam del año “con la actitud correcta”, algo que “nunca habría pensado” en febrero pasado, cuando volvió a competir después de siete meses alejado de las pistas debido a una lesión en la rodilla izquierda.
Preguntado por si fue difícil ver el año pasado la final del Abierto de EE.UU. en el que no pudo participar, el de Manacor respondió con un tajante “no”. “No fue un sentimiento extraño porque la mayor parte de las veces que he visto las finales de un Grand Slam ha sido en la tele”, dice entre risas.
Desde su regreso en febrero, Nadal ha sido casi imparable en la pista dura, tradicionalmente en la que se sentía menos cómodo, y atesora ya quince victorias sobre ese tipo de superficie en lo que va del año, una exitosa vuelta que le lleva a calificar ésta como una de “las temporadas más emotivas” de su carrera.
Su última victoria en el torneo de Cincinnati le brindó los puntos necesarios para desbancar al escocés Andy Murray y volver a estar en el segundo puesto del ránking de la ATP, aunque el mallorquín prefiere no hablar sobre una lucha por ser el número uno y reitera que se está concentrado en el día a día.
La próxima prueba a la que se enfrentará será este lunes en el arranque del torneo que se disputa en Nueva York, donde se tendrá que medir al estadounidense Ryan Harrison y podría retarse al suizo Roger Federer en cuartos de final tras el sorteo de los emparejamientos.
“No pienso en eso, en Wimbledon también se supone que íbamos a llegar (en cuartos)”, asegura el tenista sobre el hipotético partido con Federer, recordando que en ese torneo ambos cayeron antes.
La concurrida conferencia de prensa de Nadal estuvo precedida, entre otras, por las del número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, y de Federer, ahora relegado al séptimo puesto de la ATP, dos jugadores que recalcaron el exitoso regreso del mallorquín.
“Por ahora ha sido el mejor jugador este año, no hay duda de ello”, dijo Djokovic.
De hacerse con este Grand Slam, Nadal ganaría un total de 3,6 millones de dólares, puesto que, además de los 2,6 millones que se embolsaría por el torneo, recibiría un bonus de otro millón por haberse hecho este año con el US Open Series. EFE