El expresidente sudafricano Nelson Mandela, de 95 años y hospitalizado desde el pasado junio, continúa en estado “crítico pero estable”, informó hoy el jefe de Estado de Sudáfrica, Jacob Zuma.
“El expresidente Mandela está todavía en el hospital recibiendo tratamiento y sigue en estado crítico pero estable”, afirmó Zuma en un comunicado divulgado por la Presidencia.
El mandatario informó de la evolución del antiguo estadista en un discurso pronunciado en Malasia, donde recogió un premio concedido a Madiba, como se conoce popularmente en Sudáfrica al exgobernante.
“Al tiempo que le deseamos una buena salud (a Mandela), también queremos celebrar su legado y aprender de él, con el fin de construir un mundo mejor”, agregó Zuma.
El jefe de Estado recibió, en nombre de Mandela, el Premio a Toda una Vida por la Paz Global, otorgado por la Fundación para la Paz Global Mahathir.
El pasado sábado, el portavoz de la Presidencia, Mac Maharaj, ya confirmó el mismo pronóstico médico y admitió que a veces el estado de Madiba se vuelve “inestable”, si bien el expresidente demuestra siempre una “gran capacidad de recuperación”.
Mandela fue ingresado el pasado 8 de junio en un hospital de Pretoria por la recaída de una infección pulmonar.
El icono de la lucha contra el régimen racista del “apartheid” pasó su 95 cumpleaños en el hospital el pasado 18 de julio, día en el que recibió homenajes y felicitaciones de cientos de miles de sudafricanos y de líderes y ciudadanos de todo el mundo.
Mandela fue elegido en 1994 primer presidente negro de Sudáfrica, tras estar 27 años encarcelado en las prisiones del régimen del “apartheid”, donde contrajo los problemas pulmonares que ahora padece.
En 1993, Mandela fue galardonado con el premio Nobel de la Paz junto al último presidente del régimen del “apartheid”, Frederik de Klerk, por la apuesta de ambos por la reconciliación y la convivencia como elementos con los que poner fin al régimen racista que imperó en Suráfrica durante casi cinco décadas. EFE