La estatal malasia Petronas está en proceso de abandonar el desarrollo de crudo extra pesado Petrocarabobo en la Faja del Orinoco tras desacuerdos con Petróleos de Venezuela (PDVSA), socia mayoritaria del proyecto de 20.000 millones de dólares, reseña Reuters.
En 2010, Petronas tomó una participación del 11 por ciento en la empresa mixta, liderada por PDVSA y que incluye a la española Repsol, la india ONGC y otras dos pequeñas firmas indias para operar un emblemático desarrollo que puede producir hasta 400.000 barriles por día (bpd) de crudo.
La decisión de Petronas de retirarse del promisorio bloque aún debe ser aprobada por el Ministerio del Petróleo de Venezuela, que ha querido comentar el asunto.
Su salida podría verse obstaculizada por tensiones de larga data entre PDVSA y sus socios privados respecto de cómo deben ser compensadas las compañías que abandonan el país OPEP y cómo se valorizan los barriles de crudo que administran, luego de que anotaran las reservas en sus libros como parte de sus activos.
A continuación, los posibles escenarios mientras Petronas intenta dejar el país:
– Pdvsa compra la participación de Petronas
Como accionista mayoritario, PDVSA podría ejercer su primera opción de compra de las acciones de Petronas.
Como ha hecho en ocasiones anteriores, probablemente PDVSA querrá compensar a Petronas de acuerdo al “valor en libros” de sus activos, basado en cuánto dinero puso la compañía en Petrocarabobo al momento de la inversión.
Pero se espera que Petronas busque recuperar sus inversiones a valor de mercado o de reposición de los activos, lo que arrojaría una cifra mucho más alta.
Petronas aportó una porción de los 1.050 millones de dólares que un consorcio integrado por las firmas privadas que participan en el proyecto pagó al Gobierno como bono de acceso a las reservas de Petrocarabobo.
Además, al momento de inicio de la producción, a finales del 2012, se comenzaron a realizar aportes de capital a la empresa mixta y se activó un financiamiento de 1.000 millones de dólares otorgado progresivamente por el consorcio a PDVSA.
La discusión entre las socias sobre la valoración de los activos podría tomar un largo tiempo, como ocurrió con las nacionalizaciones petroleras de 2006-2007 lideradas por el entonces Presidente Hugo Chávez, quien falleció en marzo.
En ese momento, PDVSA prefirió compensar a muchas de sus socias con crudo, en lugar de efectivo, dados sus conocidos problemas de flujo de caja al financiar la porción mayoritaria del gasto público venezolano.
Si PDVSA asume una posición inflexible en las negociaciones, la disputa podría terminar en tribunales internacionales como ocurrió con los arbitrajes solicitados por las multinacionales Exxon Mobil y ConocoPhillips.
Al final, Petronas podría verse presionada a aceptar la valoración propuesta por PDVSA y asumir las pérdidas que podrían derivarse de ello como precio a pagar por salir del país.
Esto sentaría un nuevo precedente para otras petroleras que han intentado vender sus participaciones en empresas mixtas con PDVSA y además dejaría a las socias privadas del consorcio con aún menos margen de maniobra del que actualmente tienen para la toma de decisiones sobre el proyecto.
-Petronas vende a un privado
Petronas podría recibir una oferta de uno o varios de los socios privados de la empresa mixta y ejecutar una venta si esta recibe aprobación de PDVSA y el Gobierno venezolano.
Sin embargo, fuentes en ONGC y otra de las compañías indias que conforman el consorcio dijeron a Reuters que es improbable que adquieran el 11 por ciento de Petronas, aunque ya comenzaron conversaciones.
Una fuente cercana a ONGC agregó la empresa está incrementando su endeudamiento para financiar otras compras.
El mayor socio privado del consorcio, Repsol, figura como un potencial comprador, pero la firma se enfrenta a un amplio plan de negocios en la región y particularmente en Venezuela, en donde forma parte de un gran proyecto de gas costa afuera con PDVSA y la italiana ENI que requiere miles de millones de dólares.
Otra opción de salida para Petronas, para evitar una larga disputa sobre el valor de los activos, es intercambiar su participación por instalaciones de refinación o almacenamiento de PDVSA o de Repsol en el exterior.
– Venezuela bloquea la negociación
Si PDVSA o el Ministerio, ambos conducidos por Rafael Ramírez, bloquean una oferta de compra entre los socios privados del proyecto y Petronas se rehúsa a aceptar la valoración de activos propuesta por al estatal, la estatal malasia podría verse impedida de irse del país en el corto plazo.
Petronas podría buscar otra oferta externa en efectivo o intentar un nuevo intercambio de activos con una compañía diferente a PDVSA o sus socias, dependiendo de la aprobación del Gobierno venezolano.
Varios intentos de transferencia de activos privados en empresas mixtas lideradas por PDVSA han sido bloqueados por el Gobierno en los últimos años, incluyendo la venta del interés de la firma estadounidense Harvest Natural Resources en el proyecto Petrodelta a la indonesia Pertamina.