En Venezuela desde finales del año 2012, no hay reactivos para realizar pruebas especiales para el monitoreo y control de la infección por VIH, además existen fallas en la entrega de fórmulas lácteas a las madres que tienen el virus, ya que la lactancia es una vía de transmisión al bebé, por lo cual se les recomienda sustituir la leche materna.
El Impulso/Marianli Suárez Valera
Así lo denunció Jhonatan Rodríguez, presidente de la Organización StopVIH, quien destacó que las personas con VIH han venido reportando serias fallas.
“Estamos frente a un grave crisis de desabastecimiento de medicamentos para tratar el VIH en Venezuela, actualmente escasean Prezista, Truvada, Abacavir/Laminuvidina, entre otros. A esto se le suma el suministro de Ritonavir vencidos con la excusa que no hay más inventario de este fármaco en la farmacia”, indicó Rodríguez.
“Todo este delicado contexto debe hacer reflexionar a las autoridades sanitarias, a nuestros gobernantes y a todos los actores de la lucha contra el sida, ya que se está exponiendo seriamente la salud y la vida de miles de venezolanos, cuyo derecho al suministro de antirretrovirales de forma ininterrumpida y sin costo alguno está establecido en la legislación venezolana vigente”.
No hay sustitutos
Ante esta grave escasez de medicamentos y en especial de fórmulas lácteas, las alternativas son prácticamente nulas.
El alimento de los bebés hasta los 6 meses no puede ser sustituido por alimentos complementarios, sólo debe alimentarse de la leche materna o en casos de VIH o algún otro tipo de problemas, con fórmulas lácteas, como lo explica la Dra. María Ferrer, pediatra especialista en lactancia.
“Luego de seis meses se puede comenzar a dar al bebé alimentación complementaria y uno o máximo dos teteros al día. No se debe dar leche entera que no debe darse nunca en niños antes de los dos años. Lo ideal es la lactancia materna hasta el primer año de edad”.