La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) acusó el martes al gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de estrangular económicamente a los periódicos nacionales, impidiéndoles el acceso a materias primas importadas, para su publicación. AFP
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Claudio Paolillo, condenó lo que calificó como “una conveniente doble moral del gobierno del presidente Nicolás Maduro, una especie de ‘escasez programada'”.
Esta “mañosa y poco creativa forma de acallar las voces independientes y críticas en el país”, dijo Paolillo, ha obligado al cierre de varios diarios de provincias venezolanos, que no cuentan con papel para sacar sus publicaciones impresas.
La reacción de la SIP se produjo luego de un editorial publicado el domingo por el diario El Impulso, un reconocido periódico de la ciudad de Barquisimeto (noroccidente de Venezuela), en el que anunció que a partir de este martes 1 de octubre tendrá que reducir el número de páginas y del uso del color debido a falta de insumos de producción.
El editorial de El Impulso denunció que después de 11 meses de gestión todavía persiste el “silencio oficial” al reclamo de la prensa y que no consiguió que el gobierno le autorizara acceder a divisas para comprar papel, tinta, planchas de impresión, repuestos de su impresora y otros materiales indispensables, viéndose obligado a condicionar su publicación, citó un comunicado de la SIP divulgado desde su sede en Miami.
Para Paolillo, director del semanario uruguayo Búsqueda, “por un lado, el gobierno acusa a los empresarios privados de especular y causar el problema de escasez de productos de primera necesidad de la canasta familiar, mientras tanto omite referirse a la falta de insumos para la publicación de diarios, siendo el gobierno el único responsable que puede autorizar la importación de los mismos”.
El periódico explicó que “ha sido un verdadero calvario” obtener los permisos de importación, un tema sobre el que la SIP viene insistiendo desde hace semanas, después que se conoció que varios periódicos del interior del país debieron dejar de publicarse por falta de materiales, entre ellos, El Sol de Maturín, estado de Monagas; Antorcha, estado de Anzoátegui; El Caribazo, La Hora y El Caribe, estado de Nueva Esparta y Los Llanos y El Espacio, en estado de Barinas.
Para la importación de insumos y productos extranjeros, los periódicos (o los distribuidores de papel) necesitan una cuota de divisas que autoriza Cadivi – Comisión de Administración de Divisas – después de recibir un permiso de certificación de productos de no producción nacional, que originalmente debe emitir el Ministerio de Industria y Comercio (MILCO), lo que demanda meses de espera.
En el último enfrentamiento del gobierno venezolano con la prensa, el sábado pasado el presidente Nicolás Maduro acusó a los medios de comunicación de impulsar una “guerra psicológica” para propiciar “compras nerviosas” y garantizó que el gobierno abastecerá de productos alimentarios. AFP