El hueco de la Francisco de Miranda hunde al comercio

El hueco de la Francisco de Miranda hunde al comercio

La comerciante Gloria Jesús observa el avance de la intervención en la canalización de la quebrada Pajaritos, a escasos metros de su local, en la avenida Francisco de Miranda, publica El Nacional.

DANIEL PALACIOS YBARRA
dpalacios@el-nacional.com @dapy_

Desde hace casi un mes, cuando se registró el cierre parcial de la vía, las ventas cayeron progresivamente hasta ahora, cuando calcula que sus ingresos han disminuido hasta en 80%, sin que conozca de ninguna medida para compensar a más de 30 locales que han resultado seriamente afectados por los trabajados de reparación, que involucran al personal del Metro de Caracas, el Ministerio de Transporte Terrestre y la empresa contratista Zago.





La vendedora pasa el día entre el polvo, la contaminación sónica y el caos del tránsito.

“Demasiado tengo con el costo de las chucherías que cada vez están más caras, como para ahora tener que padecer esta situación. Tengo más de 10 años acá y nunca se había registrado una situación de esta magnitud. Si somos puntuales con el pago de impuestos, es justo que seamos reconocidos y se nos indemnice, especialmente si esto se prolonga hasta el último trimestre del año, cuando pagan las utilidades”.

Un poco más abajo, en una esquina de la avenida Francisco de Miranda, está el local de Ixora Díaz. Sus entradas también han mermado, aunque no de manera tan estrepitosa como las de su compañera de Los Palos Grandes. “He dejado de vender la mitad de lo que comerciaba antes porque cortaron la electricidad de manera permanente. Eso significa que mi nevera ya no sirve. Y no puedo ofrecer fríos los refrescos que tanto piden los clientes. Son quizás tres gaveras las que dejo de vender, que son como 60 gaseosas. Nadie responde por la situación de los kiosqueros. Sería ideal el apoyo de la Alcaldía de Chacao para que nos ayude a consignar el reclamo ante los responsables de la obra”.

Sin estacionamientos. En la torre Banco del Orinoco, del lado sur de la vía en reparación, entre tierras y escombros, hay cadenas de comida rápida que reportan pérdidas de hasta 50%, por el cierre del acceso a los puestos de estacionamiento. Los gerentes informaron que la clientela ha migrado hacia otros locales de comida más cercanos, situados en rutas alternas.

Elsy Meneses lo pensó ayer muy bien antes de ir a uno de esos restaurantes. “Pero finalmente vine. El problema es que tengo que comer entre la tierra y el polvo que desprende la instalación de la tubería”.

Para sorpresa de los vecinos, las colas no son tan fuertes en horas del mediodía. Víctor Lara señala que hay suficiente presencia de Polichacao, que coordina el tránsito en horas pico.

Pero no todos opinan lo mismo. Rolando Rondón pidió a ese organismo de seguridad que reoriente sus esfuerzos en horario nocturno, no sólo para mejorar la circulación. “El martes ocurrieron dos arrebatones de celulares. Robaron a una muchacha que salía de la sede de Bancrecer y a otra que caminaba cerca del Centro Plaza”. Denuncia que esta situación deriva de la oscuridad en la zona, por el corte de suministro de luz en el alumbrado público.