Cuando una persona no encuentra empatía entre su cuerpo y sus gustos, la transexualidad se presenta como una alternativa, con el fin de identificarse. RNW
¿Qué tan complicado es para ti responder si eres hombre o mujer? Muy probablemente no necesitas mucho tiempo para pensarlo; sin embargo, no todos responden con rapidez. Una persona transexual es aquella que, a través del consumo de hormonas o mediante tratamiento quirúrgico, altera sus condiciones biológicas con el fin hacer una transición hacia el sexo opuesto.
Para este grupo minoritario, la pregunta del inicio no fue fácil de responder, y ahí empieza todo. Aparece una duda interna, cuando el cuerpo del sexo biológico no es el adecuado para comportarse y actuar de forma libre. Llega el momento de decidir si cambiar o no de sexo es lo óptimo.
Además de la complejidad que la decisión personal implica, hay factores externos que resultan clave para la concreción de la transexualidad: la familia y la sociedad. Estos dos puntos son importantes, debido a que todos somos seres gregarios y la asociación es vital para el hombre.
No obstante, la aceptación ante el círculo social de las personas transexuales tampoco es sencilla. Los estereotipos y preconcepciones de lo masculino y lo femenino, son un obstáculo más para romper el código establecido, dando paso a la transfobia, que es la práctica de la discriminación de personas transexuales.
Y es que a decir del doctor en Sociología, Eduardo Reyes, la perspectiva sobre las minorías sexuales se ha abierto más, a partir de ciertos derechos jurídicos; no obstante, aún hay tabús que generan presión social, que ocasiona el ocultamiento de las preferencias sexuales. (Conozca la historia de Mario Julián, un trans masculino)
¿Existe una explicación absoluta de lo que mueve a las personas a cambiar de sexo?
La Clasificación Internacional de Enfermedades, de la Organización Mundial de la Salud, así como el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales, elaborado por la Asociación Americana de Psiquiatría, consideraba la transexualidad como un “padecimiento”, calificado como un trastorno de identidad de género. No obstante, luego de aprobarse el 1 de diciembre de 2012, en mayo de este año esa tipificación terminó.
Si bien lo anterior significa un avance, logrado entre otros factores por la presión de activistas y personas transexuales, la sociedad aún no parece comprender completamente el tema.