La periodista Sebastiana Barráez publica en su columna del semanario Quinto Día “Sebastiana Sin Secretos” un nuevo “chanchullo rojo” en el que están involucradas 381 camionetas importadas al país con sobreprecio que fueron abandonadas y desaparecidas.
“Alguien en Bariven hizo un tremendo negocio, no sólo porque compró los carros del 2012, sino porque lo habría hecho con más del doble del precio… El negocio fue adquirir las camionetas vencidas, dejarlas en abandono para que nadie investigue quién engañó así al Estado”, revela Barráez.
“Son 381 camionetas que iban para Bariven/Pdvsa. Venían de Miami hacia Guanta, pero llegaron al puerto Guaranao de Punto Fijo. Con los primeros 28 vehículos se detecta que no tienen la documentación en regla. Para que no entren “en abandono” las afianzaron mientras corrigen lo de los documentos. No se logró. Ni con esos ni con el resto de los 381 vehículos que, a los 30 días, entraron en la categoría de abandono. Los vehículos llegados, el 31 de enero 2013, son modelo 2012 y en Venezuela no está permitida la importación con dólares oficiales de vehículos fríos, viejos o como quieran llamarlos aunque sean 0 kilómetro. Las licencias de importación son para vehículos del mismo año o el siguiente, jamás para el anterior. Alguien en Bariven hizo un tremendo negocio, no sólo porque compró los carros del 2012, sino porque lo habría hecho con más del doble del precio. Veamos un par de ejemplos. Cuatro camionetas pick up 4×2 automática de 8 cilindros, dos puertas, equipo de sonido, aire acondicionado, cabina simple, modelo 2012, costaron 71 mil 200 dólares cada una.
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