Activistas de la agrupación ecológico y política venezolana “Cúspides del Alba” coronaron El Ávila, montaña que se levanta entre Caracas y el Mar Caribe e hicieron ondear la bandera de Ecuador entre gritos a favor de la Amazonía y en contra de la petrolera estadounidense Chevron-Texaco. EFE
“Defender el Amazonas pasa por defendernos a nosotros mismos y si verdaderamente creemos en la integración debemos responder como bloque para protestar y rechazar esta agresión de la Chevron Texaco”, declaró a los periodistas la coordinadora del Comité de Solidaridad Venezuela-Ecuador, la diputada Ana Elisa Osorio.
Chevrón fue condenada en 2011 por un tribunal ecuatoriano a pagar más de 19.000 millones de dólares de indemnización por los graves daños que se le imputan haber ocasionado en la Amazonía durante el tiempo en que operó en Ecuador, entre 1962 y 1990.
Un tribunal arbitral de La Haya, a su vez, tramita en la actualidad una demanda de la petrolera que busca endosar a Quito el pago de la indemnización.
La también vicepresidenta del grupo venezolano del Parlamento Latinoamericano (Parlatino) añadió en la cima del montañoso Waraira Repano, conocido como El Ávila, que ante la ofensiva de la petrolera se acudirá “a instancias de integración latinoamericana y caribeña”.
Entre estas nombró la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) y Petrocaribe, donde espera “juzgar” a Chevron-Texaco.
La parlamentaria venezolana añadió que el Comité que coordina efectuará el próximo 24 de noviembre “una jornada ciclística en Caracas también en solidaridad con Ecuador, en la cual espera que miles de ciclistas recorran la ciudad y se reúnan frente a la embajada del país andino y amazónico.
Fernando Dávila, del grupo “Cúspides del Alba”, dijo que más que solidarizarse con Ecuador “es hacerlo con toda nuestra gran patria latinoamericana, dado que ese pulmón vegetal que une a varios países (la Amazonía) es la principal reserva mundial para garantizar los próximos 200 años de vida del planeta”.