Que los comercios eviten la quiebra y puedan reponer el inventario agotado después de la orden de bajar los precios, establecida por el Gobierno nacional, dependerá de que la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) asigne “a tiempo” los dólares para la importación de electrodomésticos, ropa y otros rubros, publica El Tiempo.
Este panorama lo planteó en rueda de prensa el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Bachar Kobrosly, quien solicitó al ente agilizar esos procesos para que los negocios puedan seguir funcionando y lo hagan con el costo oficial de la moneda: Bs 6,30.
Sostuvo que el gremio se mantiene en incertidumbre porque desconocen cómo podrán llenar nuevamente sus anaqueles si no reciben las divisas a tiempo.
“Ellos no saben si vender a costo para perder y cerrar o cambiar de actividad, lo que por cierto deberán hacer muchos si los dólares no son asignados”, afirmó.
Agregó que otros empresarios dependen de proveedores para surtir sus tiendas, pero algunos de ellos también han reportado retrasos en la asignación de la moneda estadounidense.
La gerente de la tienda de ropa Juliennys, Yolimar Aquino, explicó que no ha trabajado con dólares de Cadivi porque nunca les han sido asignados. Por el contrario, detalló que compra a otras empresas para surtir sus almacenes en el bulevar 5 de Julio, Puente Real (Barcelona) y Plaza Mayor (Lechería).
Sin embargo, lamentó que su proveedor tenga un mes sin distribuirle prendas, cuando la entrega se hacía una vez por semana.
En sus locales, el Ejecutivo nacional estableció rebajas de 20% a 30%, pero en otros artículos permitió incrementos, por lo que Aquino dijo no haber registrado pérdidas.
“Lo que me queda durará una semana más. Por eso, quiero pedirle a la clientela que compre con calma, porque tengo a 36 empleados y también me preocupa su futuro”.
Irregularidad
La venta de electrodomésticos a precios bajos en el comercio Casa Moderna, en la avenida Principal de Lechería, fue motivo de reclamos y malestar de quienes estaban haciendo la cola desde horas de la madrugada.
Lismary Ramos denunció que funcionarios de Polibolívar ingresaron al local y salieron con artículos que montaron en al menos cinco patrullas.
Vanessa Malavé, quien esperaba comprar desde el sábado, confirmó la versión y pidió a las autoridades investigar el destino de esos productos.
No hay
En las tiendas de electrodomésticos de Barcelona y Puerto La Cruz ya comenzaron a desaparecer los productos, a raíz del expendio a precios bajos. Así lo constató el equipo de El Tiempo.
Los primeros artefactos en ausentarse fueron aires acondicionados. “Desde el primer día se acabaron los aires”, afirmó Jorge González en una tienda de Puerto La Cruz. Además informó que los productos que más demanda tienen son las cocinas, secadoras y lavadoras.
El dueño de la tienda Sony Venezuela declaró que bajó sus precios 30% y que esto fue “un regalo de mi negocio”.
La compradora Yurabi Canelo denunció haber visto una lavadora de seis kilos en Bs 8 mil, lo cual le pareció caro y aseveró que el artículo más económico es la cocina, que la ha visto en Bs 3 mil.
Mervis García apoyó a Canelo en su apreciación. Contó que esa fue la primera cola que hizo porque en otros comercios “hay muchas personas”.
Jorge Rodríguez, quien llevaba un televisor de 22”, reveló que se lo compró a un revendedor por 2 mil bolívares para no hacer colas.
Lavadora, cocina, televisor, microondas, tostiarepas y una mesa para computadora fueron los productos adquiridos por Dilia Gabo, quien dijo que “valieron la pena las colas porque ahorré bastante”.
Los lugares en los que también había filas eran las tiendas de ropa, algunas ubicadas en el centro comercial Regina. Allí se implementó un sistema de venta con lista de números a las 10:30 am.
Quienes perdieron el turno no fueron atendidos.
Motos baratas
17% de descuento implementó la compañía Empire Keeway a la ga- ma de motocicletas que se expenden en el local Total Moto de la avenida Municipal de Puerto La Cruz. Así lo confirmó el gerente del negocio, Juan Pérez, quien explicó que la rebaja se autorizó después de una reunión entre la ensambladora y la comisión presidencial que estudió la estructura de costos de la empresa.