La seguridad fue reforzada hoy en el complejo Union Buildings de Pretoria, sede del Gobierno de Sudáfrica, que acogerá la próxima semana la capilla ardiente con los restos del fallecido expresidente Nelson Mandela ante la avalancha de personas que allí le rinden homenaje.
Agentes de policía han bloqueado las dos entradas principales al recinto gubernamental, ante la congregación de centenares de ciudadanos que han acudido allí a dar su último homenaje a Mandela, informó la agencia de noticias sudafricana Sapa.
Además, los agentes están registrando vehículos e impiden su entrada en el Union Buildings, donde Mandela tuvo su oficina cuando se convirtió en 1994 en el primer presidente negro del país, tras sufrir 27 años de cárcel por su oposición al régimen racista del “apartheid”.
Los ciudadanos han dejado muchas tarjetas de homenaje y ramos de flores ante el recinto en memoria del héroe sudafricano.
“Un hombre al que todo el mundo admiraba, una persona de espíritu libre y siempre serena. Él nos liberó de todo”, reza uno los mensajes.
“Gracias por enseñarme el perdón y el amor hacia el enemigo. Rezo para que el mundo siga tus pasos”, se lee en otra tarjeta.
El viernes por la noche, un grupo de jóvenes dedicó bailes y cánticos a Madiba -como se conoce al expresidente en su país-, mientras ciudadanos hacían cola para firmar un libro de condolencias en el complejo Union Buildings.
Trevor Bika, desempleado y padre de cuatro hijos, aseguró haber caminado veinte kilómetros para homenajear a Mandela.
“Sentí el fuerte deseo de venir aquí, donde Madiba solía tener su oficina cuando era presidente, para rendir homenaje a un gran hombre”, dijo Bika.
Entre el 11 y el 13 de diciembre, los restos del exmandatario reposarán en una capilla ardiente en la sede del Gobierno de Sudáfrica, antes del funeral de Estado previsto para el día 15.
Mandela murió el pasado jueves a los 95 años en su domicilio de Johannesburgo, tras recibir cuidados intensivos en los últimos meses por la recaída de una infección pulmonar.
EFE