Un satélite desarrollado conjuntamente por Brasil y China no consiguió entrar en órbita luego de fallar el cohete propulsor tras el lanzamiento el lunes, informó la prensa estatal.
El satélite sensor remoto de alta resolución fue lanzado a bordo del cohete chino Gran Marcha 4B en la provincia norteña de Shanxi, señaló la agencia noticiosa oficial Xinhua. Expertos chinos y brasileños analizan la causa del fracaso, agregó la agencia, que citó a fuentes militares de las que no proporcionó su nombre.
China tiene una vasta gama de cohetes Gran Marcha para uso en lanzamientos comerciales.
Este año, un funcionario del programa espacial chino dijo que el país busca aumentar su participación en el mercado global de lanzamientos de satélites comerciales de 3% a 15% para 2020.
El percance generó cuestionamientos sobre el programa espacial brasileño, que sólo pudo lanzar el CBERS-3 tres años después de la fecha prevista y aun así sufrió el percance. El satélite debía ser lanzado en 2010 cuando salió de funcionamiento el CBERS-2, también sino-brasileño.
El fallido satélite requirió una inversión brasileña equivalente a 118 millones de dólares y se le consideraba fundamental para reforzar la vigilancia de la Amazonia para combatir la deforestación en el bosque húmedo, que creció 28% en el último año según datos oficiales.
De acuerdo con el Instituto de Pesquisas Espaciales de Brasil, China y Brasil convocaron una reunión para el martes con el fin de iniciar inmediatamente conversaciones técnicas para anticipar el montaje y lanzamiento de un nuevo satélite. En la cita participarán representantes de las agencias involucradas en el proyecto por los dos países.
Equipados con cuatro cámaras de alta resolución, la serie de satélites CBERS han permitido generar imágenes del territorio brasileño para usos diversos como acompañar la deforestación en la Amazonia y otros ecosistemas, vigilar desastres naturales y evaluar la vocación agrícola del suelo.
El CBERS-3 era el cuarto satélite de la serie construidos por Brasil y China y se trata del primero que sufre un percance, después de que los tres primeros cumplieron sus misiones los últimos 25 años. AP