Sin la corrección y aplicación de la hoja de cálculo los trabajadores de Sidor decidieron levantar la huelga de 34 días este miércoles en la tarde, publica Correo del Caroní.
El acuerdo se hizo en asamblea general de trabajadores luego de que el vicepresidente de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), Heber Aguilar, empeñara su palabra y rogara a los trabajadores retomar las operaciones de la siderúrgica más importante del país y del Caribe, a cambio de pagar la diferencia de utilidades a salario integral este viernes y los 15 mil bolívares (acordados el 8 de octubre) a partir del 30 de enero.
No le costó mucho al presidente del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Sus Similares (Sutiss), José Luis Hernández, y al secretario general, Julio López, entusiasmar a los sidoristas con las ofertas de la CVG pues, tras más de un mes de conflicto, los bríos habían decaído.
Las propuestas expuestas ayer a los sidoristas se consensuaron entre un sector del comité ejecutivo de Sutiss, la mesa técnica salarial y la CVG el viernes pasado como la última carta para solucionar el conflicto antes de que finalizara el año.
Previo al acuerdo de este miércoles, las partes habían intentado resolver el conflicto en CVG, Sidor, la Inspectoría del Trabajo y los espacios del Comando Regional N° 8.
La intervención como mediador del conflicto del vicepresidente de la CVG, Heber Aguilar, resultó ser el salvavidas para la particular paralización que transcurrió con indiferencia ante el presidente Nicolás Maduro.
Un paso atrás…
De modo que este martes, sin más nada que ofrecer, el secretario general de Sutiss, Julio López, planteó a los trabajadores aceptar dar “un paso atrás pero dos adelante en el mes de enero”, dijo. “Ya vendrán mejores propuestas”, agregó en asamblea matutina en el portón III de Sidor.
La exposición del sindicato no cautivó de inmediato a los siderúrgicos. Pese a que el vicepresidente de la CVG rogó y juró que pagaría antes de este viernes, los trabajadores pedían primero el depósito para retomar las operaciones.
La posición de los sidoristas hizo flaquear al presidente y secretario general quienes, frente a todos, se contradecían en las salidas al conflicto.
Mientras López asomaba arrancar la planta, Hernández recomendaba a los trabajadores colocar como condicionante el depósito. “No vayan a decir luego que José Luis se rajó (…) pero hay que reconocer que el muchacho es un buen tipo, tiene buenas intenciones el gordo”, decía sobre el vicepresidente de la CVG.
El panorama se complicó cuando intervino el trabajador Mario Valor, integrante de la mesa técnica, y agregó la necesidad de revisar -antes de aceptar la propuesta- qué mes tomaría Sidor para cancelar la diferencia de utilidades.
Todos esos elementos hicieron que en la mañana de este miércoles el conflicto no cesara, pues el secretario general y parte de la mesa técnica debieron ausentarse a dilucidar ese punto.
Sin calipso
En la tarde, aunque le tomó más tiempo, la dirigencia sindical tuvo mejor control del escenario y el vicepresidente de la CVG se esmeró en intentar trasmitir confianza a los sidoristas.
Para que aceptaran retomar las operaciones sin el depósito en las cuentas, Aguilar dijo ser el “soldado de Chávez”, un “amigo de los trabajadores”, que se fundía con los siderúrgicos, que cumplía órdenes, reconoció que en algún momento falló y prometió a los trabajadores no tomar represalias y juró tantas veces que en algún momento pareció que se arrodillaría ante los sidoristas.
En este instante, el secretario general intervino para pedir a los trabajadores confianza en el vicepresidente de la CVG del que, hasta ahora, podía dar fe de la disposición para resolver el conflicto.
Pese a todo, un trabajador de la acería de planchones dijo que para evitar un nuevo incumplimiento, era mejor arrancar cuando depositaran en las cuentas.
El respaldo de los trabajadores a esa propuesta, una vez más, hizo que Aguilar retrocediera en su propuesta y se contradijera en la disponibilidad de recursos para cumplir con la diferencia de utilidades.
Cerca de las 4:00 de la tarde, y luego de las promesas en nombre de Dios y de Hugo Chávez, los trabajadores aceptaron retomar las operaciones con el depósito de la caja de ahorro y el pago de la diferencia de utilidades con el salario del mes de noviembre.
Interrogantes
La propuesta aceptada por los sidoristas supone un revés toda vez que la base del conflicto y punto de honor para terminar la huelga no se logró: la hoja de cálculo. “Levantar el paro sin la aplicación de la hoja de cálculo es una traición a los trabajadores” decía días atrás el presidente de Sutiss.
La oferta es similar a la que -desde el inicio de la huelga- planteaba Sidor a los trabajadores.
En 56 días de conflicto, la gerencia de la estatal pasó de ofrecer 150 días a salario integral (Sidor informa del 22 de septiembre) a 120 días de salario integral el pasado 2 de diciembre, más 30 mil bolívares como adelanto de utilidades, de los cuales 15 mil correspondían al pago de pasivos.