Un recién nacido sobrevivió después de que la pasada Nochebuena su madre lo arrojara a un patio de su casa de Madrid, donde permaneció varias horas a la intemperie antes de que su propia abuela lo encontrara y avisara a los servicios de emergencia.
La intervención de dos agentes de la Policía española fue decisiva para mantener con vida al niño, ya que cuando acudieron al lugar el bebé estaba ya en parada cardiorrespiratoria y le practicaron las maniobras de reanimación hasta la llegada de los servicios sanitarios, informaron fuentes de ese Cuerpo.
El suceso, conocido hoy, ocurrió la madrugada del pasado día 24, día de Nochebuena, cuando una mujer dio a luz en su vivienda madrileña y tras cortar el cordón umbilical envolvió al bebé en un pantalón vaquero y lo arrojó desde la ventana de su cocina a un patio interior de la finca.
A continuación, la mujer avisó a sus padres, que ignoraban que había estado embarazada, para que la llevaran al hospital porque decía haber sufrido una fuerte hemorragia.
Horas después, durante las cuales el bebé permaneció a la intemperie, la abuela vio desde la cocina del inmueble que en el patio había un crío.
Según fuentes policiales, rápidamente salió a recogerlo y avisó a los servicios de emergencia.
Ahora el menor está ingresado en un hospital con pronóstico reservado.
La madre del recién nacido fue detenida posteriormente como presunta autora de un delito de asesinato en grado de tentativa. EFE