Científicos de la Universidad de York demostraron que se pueden recuperar las imágenes reflejadas en la pupila de una persona fotografiada. Este trabajo puede ser un avance en medicina forense, según explicó el autor del trabajo, Rob Jenkins. El iris del ojo en una imagen puede tener “una gran cantidad de información oculta”. En ellos se puede ver al fotógrafo y a los transeúntes, caras que se pueden usar como evidencia durante pesquisas policiales.
Para la investigación, publicada en PLOS ONE, utilizaron un zoom de alta resolución en una fotografía y lograron detectar a la persona que tomó la foto junto a personas.
En concreto, aseguran, es posible reconocer las caras que aparecen reflejadas en la córnea de una persona retratada hasta en un 80% de los casos.
“La pupila del ojo es como un espejo negro. Para mejorar la imagen, tienes que acercar y ajustar el contraste”, explicó Jenkins, que a su vez resaltó que este sistema podría ser utilizado para casos forenses sin resolver. “Las reflexiones en los ojos de las víctimas podrían revelar la identidad del fotógrafo”, insistió.
“Los ojos de tus fotografías pueden mostrar dónde estás y con quién”, advirtió.
Vía Infobae