En una drástica e insólita medida para sostener la disciplina de sus futbolistas, el equipo profesional escocés Partick Thistle fue un poco más allá del límite. Dejando de lado lo divertidas o graciosas que puedan ser las imágenes, el ejercicio de humillación para el futbolista que se consideró “peor entrenado” es un tanto polémico.
Fue el juvenil Gary Fraser quien sufrió el castigo. Previo al inicio de una nueva semana de entrenamientos, los integrantes del plantel hicieron una apuesta extrema: aquel de peor rendimiento en las prácticas, sería penado al tener que utilizar un traje de ballet, más conocido como tutú.
En el particular entrenamiento, con el “infiltrado de rosa” entre el grupo, hubo algunas risas y mucho miedo… claro, cualquiera puede ser el próximo “bailarín” del Partick Thistle.
Vía Daily Mail