Escuchaba el llanto y los quejidos cada vez que pasaba por los tarantines, ubicados frente al Hospital Chiquinquirá. No sabía de dónde salían. La curiosidad la motivó a revisar entre los puestos de ropa femenina. Rosa Esther de los Reyes Rincón encontró ayer, a las 10.30 de la mañana, dentro de una caja de cartón, desnudo y envuelto en una cobija a un bebé. laverdad.com
Cargó al infante y lo llevó a la emergencia pediátrica. La enfermera de guardia en principio se negó a aceptar al pequeño, por aquello de los tres bebés que raptó Luz Nery Otero Sandoval (37) el pasado 1 de diciembre en complicidad con dos enfermeras y una militar. Pero los funcionarios del Cuerpo de Policía Bolivariana del Estado Zulia (CPBEZ) la obligaron a procesar el ingresó, pues ya lo habían recibido y el Consejo de Protección del Niño, Niña y Adolescente ya estaba en conocimiento del caso.
Lo examinaron. Los pediatras calculan que tenga tres meses de nacido. Pesa unos dos kilos. “Está deshidratado y desnutrido”, precisó una fuente médica. Tiene neumonía. “No sabemos cómo el bebé sobrevivió al frío de la noche en ese estado”.
Los policías compraron un par de pañales y un tetero pequeño para que alimentaran al niño moreno y de unos 50 centímetros. Los padres y representantes que esperaban que atendieran a sus niños en la emergencia no se enteraron del caso. Las autoridades del hospital y los médicos se mantuvieron herméticos.
La vendedora de café temió hacerse responsable legalmente de él. Dio una dirección de habitación falsa y desapareció de las inmediaciones del centro de salud, luego de entregar al pequeño.
Para leer la nota completa pulse Aquí