“Vampire Academy”, un matrimonio entre “Crepúsculo” y “Harry Potter”

“Vampire Academy”, un matrimonio entre “Crepúsculo” y “Harry Potter”

Combinar los éxitos de “Twilight” y “Harry Potter” probablemente sea el sueño de todos los estudios de Hollywood. Los hermanos Weinstein intentan la aventura con “Vampire Academy”, una película que busca sin complejos seducir al público de las dos sagas para adolescentes.

Romain Raynaldy/AFP

La película, que se estrena el viernes en Estados Unidos (a partir de la semana próxima en Latinoamérica y el 9 de mayo en España), está dirigida por Mark Waters, un especialista en comedias románticas adolescentes, autor de “Freaky Friday” (2003) y “Mean Girls” (2004).





Para “Vampire Academy”, se asoció por primera vez con su hermano Daniel Waters, guionista de “Batman Returns” y “Demolition Man”, para adaptar el primero de los seis bestsellers de la escritora estadounidense Richelle Mead con la esperanza de proseguir la saga si la taquilla marcha bien.

La historia tiene lugar en la Academia de San Vladimir, donde Rose (Zoey Deutch) y Lissa (Lucy Fry) son llevadas a la fuerza tras faltar un año a clases.

En el mundo inventado por Richelle Mead, tres razas de vampiros habitan la Tierra: los Strigoi (inmortales y crueles, siempre en busca de sangre fresca), los Moroi (mortales y pacíficos, pero que también se alimentan de sangre humana) y los Dhampir, mitad humanos mitad vampiros, mortales y omnívoros, encargados de proteger los Moroi.

Celos, traiciones y peligro

Rose es una Dhampir y vela por Lissa, una princesa Moroi, heredera de la dinastía de los Dragomir y llamada a reinar. Su regreso a la “Vampire Academy” estará plagado de celos, traiciones y múltiples peligros.

“Sí, son vampiros y hay amenazas y tribulaciones para escapar del peligro. Pero, en última instancia, se trata de una historia de amistad entre dos chicas”, explicó Zoey Deutch en la presentación de la película a la prensa en Beverly Hills. “Y esta amistad es su prioridad, incluso antes de que los chicos”.

La cinta, producida por The Weinstein Company, la productora y distribuidora de los poderosos hermanos Weinstein, toma elementos de “Crepúsculo” y “Harry Potter”, pero también a otras sagas populares entre los adolescentes como “Los juegos del hambre” e incluso “Paranormal Activity”.

Su única verdadera originalidad es el general tono irónico, ilustrado por el personaje de Rose.

“Daniel Waters escribió un diálogo irónico y cáustico. No sé cómo logró meterse tan perfectamente en la mente de una adolescente de 14 años”, dijo Zoey Deutch. “Es hasta un poco inquietante, si se piensa bien…”, bromeó.

El humor es también, según ella, lo que diferencia la película del libro, que es mucho más serio. En la cinta, “hay muchos chistes salpicados a lo largo de toda la historia”, dijo. “Y creo que era necesario, porque en un libro hay tantos elementos narrativos que, si se adaptan tal cual a la gran gran pantalla, el resultado acaba siendo agotador”.

Si bien el libro está centrado en torno a la relación entre Rose y Lissa, también tiene el romance de rigor entre la princesa y un pálido y misterioso “Moroi”, interpretado por el británico Dominic Sherwood.

Cuando el espectador ve al “pálido y misterioso” vampiro en la pantalla, irremediablemente recuerda Edward Cullen de “Crepúsculo”, encarnado por otro británico, Robert Pattinson.

“Espero que hayamos conseguido diferenciar bastante a los dos personajes”, dijo Sherwood. “Pero no quiero ser ‘el próximo’. Quiero que me vean como Dominic Sherwood. No quiero estar a la sombra de otro”.