En medio de la conmoción que trae a los carabobeños, el asesinato de la estudiante Génesis Carmona, la diputada Vestalia Sampedro, reacciona rechazando la falta de actuación del Gobierno, bien para recibir, validar y responder las validísimas demandas ciudadanas, como para garantizar el derecho a la protesta.
“Estamos ante un hecho social y no un hecho político, que el gobierno no quiere ver, ni quiere atender. Estamos ante un hecho social que nace ante las gravísimas situaciones que nos aquejan a los venezolanos y de las cuales no encontramos respuesta. El gobierno ajeno a esto, presenta una queja por su estabilidad pero no por la estabilidad de todos los venezolanos”, apuntala Sampedro.
Cómo puede ocultar el gobierno el aumento de la criminalidad, la crisis de la salud, la escasez de alimentos, el cerco mediático y la represión, cuestiona la diputada Sampedro. “Criminalizan la protesta para poder justificar la represión ante los hechos (…) Por estos días nos queda claro el valor que el Gobierno da a los DDHH, han sido violados constantemente y en formas que llegan a niveles de crueldad, no pueden seguir con un discurso y actuar en forma contraria”.
Expresa que los hechos del día de ayer en Carabobo son sumamente graves y que deben contrastarse con el llamado a la paz, “No se puede hablar de paz e instar a la violencia. No se puede hablar de paz y atacar las manifestaciones pacíficas, por medio de motorizados, que no sólo han sido usados en estos casos, sino, durante los distintos procesos electorales en la región para intimidar”.
Señala que en una Democracia saludable, los ciudadanos hacen uso del derecho a la protesta que les otorga la Constitución Nacional y el Gobierno está obligado a garantizar su protección. “En Carabobo el gobernador llamó públicamente a sus seguidores al “contra ataque”, instando claramente a la violencia (…) entonces no es honesto, ni creíble un llamado a la Paz, haciéndose de la vista gorda ante las evidencias de los asesinatos, agresiones y torturas a los estudiantes. Hay omisión por parte del Gobierno, de haber actuado, hubiese evitado los ataques posteriores que incrementan la lista de fallecidos en manos de la represión estatal y paraestatal.
Concluye recordando otro hecho sensible ocurrido en el estado, “así cómo Mónica Spear le puso rostro a la inseguridad en Venezuela, hoy Génesis Carmona, le pone rostro a la violencia ejercida contra nuestros muchachos. Ella luchando por la seguridad y mejoras en la vida de todos los venezolanos, pierde la suya (…) como madre me hago eco del dolor que padecen las madres que pierden sus hijos a manos de la criminalidad por una parte y de la violencia “paraestatal”, por otra, muy especialmente a la madre de Génesis Carmona”.