Si es una gran cuchara de helado seguro te congelará el cerebro. Y no es broma, cualquier sustancia u objeto frío en contacto con el paladar enfría el cerebro.
Resulta que la arteria anterior cerebral se encarga de llevar calor al cerebro y mantenerlo a la temperatura adecuada, dilatándose para lograrlo. ¿Qué tiene que ver eso?
Pues cuando el frío entra en contacto con el paladar el enfriamiento es muy rápido, la arteria se dilata con mayor rapidez y la presión en el cerebro da un salto.
Esto produce el dolor de cabeza. Por ello si quieres evitarlo lo mejor será beber o comer despacio y pausado para darle tiempo a la boca de calentarse un poco.
Y si sufres de migraña esto tomar en cuenta el consejo te será aún más práctico.