Llegó Semana Santa y los marabinos echan mano de las creencias religiosas que se han mantenido por generaciones. Asistir a las respectivas misas dominicales no es suficiente. En un recorrido por inmediaciones del centro de la ciudad La Verdad pudo conversar con quienes distribuyen llamativas esencias buscadas para atraer buenas vibras y para limpiar los hogares durante estos días. laverdad.com / Henginely Huerta Duarte
La mercancía está a la vista. Diversos estantes callejeros muestran especies como sahumerio, incienso, carbón instantáneo, barillas de olor, estoraque, hoja de eucalipto y mirra. El combo de todos los ingredientes tiene un precio de 50 bolívares.
Francisco Fernández, de 51 años, se dedica a la venta de estas sustancias durante todo el asueto vacacional. “Estamos esperando mayor afluencia de clientes entre hoy (ayer) y mañana. Todos los años obtengo ganancias porque esta tradición no se puede perder”. Agregó que el precio del sahumerio aumentó en comparación con la temporada pasada. “El kilo costaba 120 y ahora se consigue alrededor de 600 bolívares”.
Para Audio Farías, comerciante, el interés de la población por realizar algunos rituales ha bajado. “Ya no es como antes. Las personas solo cumplen con asistir a las misas. Tengo más de 20 años dedicado a este negocio y antes nadie se quedaba sin bendecir su hogar”.
En la Casa Astrológica del Zulia el panorama es promisorio. Su mercancía mantiene los mismos precios que los de los revendedores. En los anaqueles se muestran aromas religiosos con una respectiva oración dedicada a san Onofre, san Cipriano y el Gran Poder de Dios. Entre los productos también se cuentan jabones y velas.
La fluidez de público es evidente en ese sitio, manejado por Alí Adarfio. “Hace 30 años me gano la vida de esta forma y los recursos nunca han bajado, a pesar de lo que cuesta comprar la mercancía a importadoras”.