Un empresario de Miami compró el jueves una mansión frente al mar que alguna vez perteneció al fallecido narcotraficante Pablo Escobar, y dijo que planea derribar la estancia de color rosa coral que fue incautada por funcionarios federales a fines de la década de 1980. Reuters
Christian Berdouare, dueño de una cadena de restaurantes en Miami, pagó 9,65 millones de dólares por la propiedad de 680 metros cuadrados situada en un acaudalado barrio de Miami Beach y afirmó que la ubicación es la principal cualidad del inmueble, no su historia.
“Si influye en algo, es negativo”, dijo Berdouare en referencia a la relación de Escobar con la mansión. “Particularmente no me gustan los narcotraficantes y no deseo tener esa energía cerca mío”.
Las autoridades estadounidenses confiscaron la propiedad en 1987, junto con activos en bienes raíces en Florida por casi 20 millones de dólares del Cartel de Medellín.
La incautación también incluyó un condominio de 45 departamentos, un apartamento de tres habitaciones cerca de un conocido centro comercial de Miami, un rancho en el centro de Florida y complejo de 240 viviendas para arriendo cerca de Fort Lauderdale que por entonces estaba valorizado en 9,6 millones de dólares.
El ex fiscal de Miami Roger Schindler compró la mansión al Gobierno estadounidense en 1990 por 915.000 dólares.
Escobar estaba entre los narcotraficantes más buscados del mundo entre fines de la década de 1980 e inicios de la posterior, junto con los miembros de la familia Ochoa que controlaban el cartel.
Escobar murió a tiros en 1993 en Colombia durante una incursión que se realizó con ayuda de agentes antinarcóticos estadounidenses. No está claro si alguna vez visitó la propiedad de Miami.
“De acuerdo a residentes del sector y agentes de bienes raíces, él definitivamente estuvo acá”, sostuvo Mirce Curkoski, del ONE Sotheby’s Realty, firma que representó a Berdouare en la venta.
Schindler dijo que, de acuerdo a algunos vecinos, había mucha actividad en la casa cuando pertenecía a Escobar.
“Solía haber embarcaciones que llegaban hasta el sector del patio”, sostuvo. Reuters