Uno de los iconos africanos más amados por los o observadores de elefantes ha sido asesinado por cazadores en busca de Marfil. Reseña Metro
El cuerpo de Satao, que vivía en Kenia, en el Tsavo Parque Nacional del Este desde hace 45 años, fue descubierto con el rostro arrancado, luego de haber sido envenenado por un dardo con la mortal sustancia.
“Rechazamos enormemente el acto ocurrido, ya se confirmó que el elefante muerto es Satao” Dijo el encargado de Tsavo.
“Una gran perdida, uno más que se va y resulta de disparador para poner el tema sobre el mantel”.
El encargado del refugio ha recopilado información sobre Satao durante al menos 18 meses, usando solo el reconocimiento del área y desde el aire con helicópteros.
Satao había sido conducido a una zona cercana de las fronteras del Parque Nacional, para que encontrara una nueva fuente de agua y vegetación que comer.
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