Figuera destacó que un hecho como ese no había ocurrido desde hace mucho tiempo en la nación y “menos uno en el cual el bus haya quedado picado de principio a fin”; por lo cual el siniestro habla de la magnitud del impacto y de la velocidad a la que iba la unidad.
“Sin haber llegado al sitio me atrevo a aseverar que ese autobús no iba a menos de 130 km por hora y de acuerdo a las declaraciones que se han recogido había presencia de lluvia”, puntualizó el presidente de Ciesvial, quien agregó que para que se registre un siniestro es común una fórmula que consiste en que haya una condición insegura, más un acto inseguro que dé como resultado un hecho vial.
TRANSPORTE PÚBLICO
Darwin Figuera especificó que los siniestros viales con transporte público en Venezuela no son tan comunes, pero cuando ocurren son muy relevantes. Hace un par de meses el centro investigó un siniestro vial en el km 42 de la ARC con sentido Caracas-Valencia, donde estuvieron involucradas tres unidades de transporte público, el cual fue muy notable por la cantidad de heridos y muertos. No es lo consecuente, sino lo contundente cuando ocurre.
En cuanto a cifras, detalló que no se tiene una estadística; sin embargo, estos no suman números relevantes en lo que respecta a estos casos, pero “el impacto que genera en la sociedad es importante, tanto que puede ser catalogado más que una emergencia como una tragedia por todo lo que hubo que movilizar para el rescate”.
Sobre las medidas a ejecutar, determinó que actualmente hay un error en lo que hacen al colocar radares de velocidad, ya que son ubicados por ejemplo en el Peaje de Guacara, una zona donde lógicamente los conductores frenarán.
Entre otros elementos, particularizó que se están colocando estos radares todos los días en el mismo lugar y los conductores están atentos para bajar la velocidad. Asimismo, indicó que no hay acción de detención ni sanción para quienes van a exceso de velocidad. Es positiva la herramienta pero falta la acción, por lo cual hay que redimensionar la estrategia.