La cifra de fallecidos por el fuerte sismo que el lunes sacudió la frontera entre México y Guatemala aumentó a cuatro y la de heridos a 118, de acuerdo con un nuevo balance ofrecido este martes por autoridades mexicanas.
La última víctima conocida del temblor fue un mexicano de 74 años que murió al desplomarse su casa en Huixtla, una localidad de la costa de la región de Chiapas (sureste), entre las más afectadas por el movimiento telúrico, explicó el director de Protección Civil regional, Luis Manuel García.
“Sus familiares habían salido a una consulta médica y no supieron de él durante el día hasta que regresaron y al remover los escombros de la vivienda lo encontraron muerto”, narró el funcionario.
Hasta la noche del lunes, García había reportado la muerte de otro vecino de Huixtla de 74 años y uno de Mapastepec de 51, ambos por el derrumbe de muros.
Así mismo, el balance de heridos en México fue elevado este martes de 4 a 37, aunque García no especificó su estado de gravedad.
En Guatemala, las autoridades informaron el lunes del fallecimiento de un recién nacido al caerle encima un techo falso de un hospital y también se contaron hasta 81 personas heridas, dos de ellas en estado delicado.
El sismo ocurrió a las 11H24 GMT del lunes a unos 47 km al sur de la ciudad mexicana de Tapachula (Chiapas), limítrofe con Guatemala.
Cerca de 3.000 casas y 46 escuelas han resultado dañadas en la subregión chiapaneca de Soconusco y también en la costa y sierra fronteriza de Chiapas, mientras que 70 viviendas quedaron con daños en Guatemala, 41 de ellas con grandes destrozos.
En México, el movimiento telúrico provocó también la caída de plafones y lámparas en el aeropuerto de Tapachula y daños en siete tramos carreteros.
El director de Protección Civil subrayó que las autoridades siguen revisando la situación en Chiapas, una de las regiones mexicanas con mayores índices de pobreza y población indígena, de alta actividad sísmica.
AFP