Rusia entregó este viernes a la comisión de investigación internacional los datos de los controladores aéreos rusos sobre la tragedia del avión malasio que fue derribado en el este de Ucrania con 298 personas a bordo.
“Los datos sobre la situación aérea del centro de control regional de Rostov”, limítrofe con la región ucraniana de Donetsk, fueron entregados por representantes de la agencia federal de la aviación rusa, Rosaviatsia, según informaron las agencias rusas.
El subdirector de la Rosaviatsia, Oleg Storchev, entregó a los miembros de la comisión otros datos en poder de la parte rusa que habían sido solicitados por Kiev.
La catástrofe ocurrió el pasado 17 de julio en una zona controlada por los milicianos separatistas a más de 50 kilómetros de la frontera rusa.
La delegación rusa, que incluye a varios expertos en aviación, llegó a Kiev la víspera con intención de desplazarse a la zona del siniestro y participar en la investigación internacional.
Además, los expertos rusos tomarán parte en la investigación de las causas de la tragedia, que las cancillerías occidentales vinculan con el lanzamiento de un misil por parte de los insurgentes prorrusos.
En cambio, éstos mantienen desde el principio que en su arsenal no disponen del armamento necesario para derribar un avión que volaba a más de 10.000 metros de altura.
Los expertos holandeses y australianos llegaron hoy a la zona cero del siniestro por segundo día consecutivo a través de un corredor seguro consensuado por el Grupo de Contacto (Ucrania, Rusia y la OSCE).
Ayer, los forenses apenas pudieron inspeccionar la zona, ya que varios proyectiles de mortero cayeron no lejos del lugar, lo que les obligó a abandonarlo con destino a Donetsk, la capital regional. EFE