Al término del primer periodo de sesiones de la Asamblea Nacional, la diputada Vestalia Sampedro, miembro de la Comisión Permanente de Finanzas, nos ofrece sus consideraciones sobre el desempeño del Poder Legislativo, que a su juicio bajo el dominio de una mayoría oficial, “ha quedado relegado a aprobar todas las maniobras del gobierno para cubrir las insuficiencias presupuestarias, con la aprobación sin límite de créditos adicionales”. NP
A juicio de la Parlamentaria carabobeña, la aprobación de estos recursos para cubrir un alto nivel de insuficiencia presupuestaria, “es la prueba de que gobierno no tiene rumbo, no planifica el qué hacer y cómo hacerlo, principal falla de su actuación”.
La suma de 280 mil millones de bolívares aprobados para gasto adicional, “demuestra que los presupuestos que traen a la Asamblea Nacional no alcanzan porque los presentan chucutos, ningún austeros, mucho menos prudentes, mienten al pueblo cada año de su presentación”, continua Sampedro, “la AN se convierte en su cómplice cuando los aprueba sin observación alguna como viene sucediendo desde el 2007 (…) No contienen todo lo que el Ejecutivo -bajo un programa- piensa gastar e invertir en las necesidades del país; esto es la prueba de que no se cumple la Constitución y explica por qué con tantísima plata, sin embargo estamos en crisis”.
Con relación a sus expectativas para próximo periodo, dice que el gobierno está obligado a corregir, a retractarse en el manejo del gasto público y enviar buenas señales a todos para recobrar confianza en el país. Al respecto afirma que una, seria sincerar el Presupuesto Nacional, lo que evitaría que los venezolanos llevemos sobre nuestros bolsillos los desaciertos de muchas políticas públicas y además frenaría la corrupción. Explica que la disposición de Fondos paralelos para administrar recursos públicos, “es una medida fuente de derroche porque nadie los fiscaliza, por allí se nos escapan los reales y luego nadie es culpable”, apuntó.
“El gobierno está obligado a evitar las reiteradas insuficiencias, a incluir todo el gasto recurrente y previsible, como los sueldos y salarios, todo el endeudamiento, a modificar la contribución especial por precios altos del petróleo, a mejorar ingresos de las regiones y a racionalizar el gasto, pues la Tesorería debe emplear sus recursos sólo para imprevistos reales y prioritarios (…) está obligado a dejar cumplir su rol a la Asamblea Nacional, de sancionar todo el gasto público y no que parte de los ingresos y las divisas provenientes de las reservas se manejen sin sanción como ocurre actualmente, con desconocimiento total de los venezolanos y a capricho de un sólo hombre. No es así como lo disponen nuestras leyes”, expone.
Finalmente, recuerda las consecuencias del “errado manejo de las finanzas” y todo el sufrimiento del pueblo en materia económica, el desabastecimiento, la pérdida del valor de nuestra moneda, carencia de servicios públicos, la inflación, entre otros tantos, para exhortar al Ejecutivo a “dejar las medidas de ensayo y error, porque comprometen nuestro futuro, a dar pasos firmes en el cumplimiento de las disposiciones constitucionales para el manejo de los fondos”. Emplazándolo a “ordenar y reducir el gasto, a tener conciencia sobre su papel como administrador de la Hacienda Pública mas no dueño de los recursos de la Republica, por tanto debe ceñirse estrechamente a las disposiciones reglamentarias para detener tan lamentables consecuencias que tardaremos en revertir, pero que demos comenzar cambios” .