Un test de ADN demostró que un japonés sospechoso de haber utilizado a varias madres subrogadas en Tailandia es el padre biológico de al menos 15 bebés, anunció la policía este miércoles.
Las motivaciones de este rico hombre de negocios no están claras, dos semanas después de que se descubriera a nueve bebés en un apartamento de Bangkok, lo que motivó las sospechas de tráfico de seres humanos que de momento no han sido confirmadas.
El japonés, hijo de un millonario que preside un imperio de telecomunicaciones, según la prensa nipona, salió de Tailandia pero envió voluntariamente a inicios de semana una muestra de ADN a través de su abogado.
En una carta transmitida por su abogado, el joven japonés solo explica que quería “tener hijos” y “poder cuidar de ellos”, precisó Kokiat Wongvorachart, responsable de la policía.
Este responsable aseguró que “de momento, no había abusos, tráfico de seres humanos o un uso ilegal de los bebés” en este caso que la prensa bautizó como “la fábrica de bebés”.
Hasta ahora, muchas parejas de extranjeros han estado viajando a Tailandia para recurrir a clínicas de fecundación in vitro y vientres de alquiler, aunque las autoridades insisten en que la subrogación a cambio de dinero no está autorizada.
Actualmente se está preparando una ley que castiga con 10 años de cárcel el recurso comercial a esta técnica de procreación.
AFP